Tras su repaso a Alberto Núñez Feijóo en su fallida investidura, Óscar Puente ha sufrido una persecución mediática por parte de la derecha que ha llegado al extremo de entrar en el terreno personal y familiar. Este sábado, El Mundo ha publicado un reportaje en el que se ha acusado a la madre del exalcalde de Valladolid de "comisaria política"

El propio Puente ha salido al paso de esto con un contundente mensaje en su cuenta personal de X."No me molestan tanto las mentiras y las incursiones falaces en mi vida privada, como el intento de entrevistar a mi hija de 16 años, a través del videoportero, aprovechando que estaba sola en casa, o que hayan insultado gravemente a mi madre que ayer cumplió 78 años. Son basura", ha precisado. 

A continuación, Puente ha ido a más y ha escrito a continuación otro mensaje ampliando su opinión sobre lo que está experimentando en relación a los medios de comunicación: "Por cierto. Esto no lo ha hecho ningún ciudadano. Ningún militante de ningún partido, como veo que alguien, equivocadamente, cree. Esto lo han hecho periodistas y medios nacionales de este país. Hoy, en concreto, El Mundo".

La presidenta de la Unión Progresista de Fiscales, Inés Herreros, ha críticado duramente la publicación de El Mundo y al periodista que firma la información, Juan Diego Madueño. "Hoy he leído la cosa más rastrera, llena de odio, machista y dolorosa que se me ocurre que un medio de comunicación puede hacer: meterse con la madre de un rival político de ese periódico. Toda mi solidaridad con la señora difamada y con su familia", ha expresado. 

Asimismo, Herreros ha pedido al reportero que "reflexione y se disculpe", ya que, según ella, "Es infame". Sin embargo, a Madueño no parece importarle en absoluto, ya que no ha dudado en responder: "Inés, infame es escribir gilipolleces como ésta. Ánimo. Ya pasó".

La derecha mediática se ceba con Óscar Puente

Nadie se esperaba la intervención del pasado martes de Óscar Puente en el Congreso de los Diputados. El exalcalde de Valladolid dejó al pleno sin palabras por el repaso dialéctico al que sometió al jefe de la oposición, Alberto Núñez Feijóo. Esta situación desesperó al Partido Popular y Génova se vio obligada a activar los satélites mediáticos para hacer campaña contra el socialista.

Al exalcalde de Valladolid le deshumanizaron, una técnica habitual entre la extrema derecha y se le llegó a comparar con distintos animales: “jabalí”, “mulo”, “mono". También se le insultó  en términos como “soberbio”, “macarra” o “chulo”. Incluso se criticó su físico y se le equiparó con “Rubiales” o el “Tito Berni. Hasta “borracho” han llegado a llamarle.

La lista de descalificativos es amplísima: “comediante”, “payaso”, “gorila”, “dóberman”, “jabalí”, “energúmeno”, “quebrantahuesos”, “fanfarrón”, “matoncillo”, “mostrenco”, "Tito Berni”, “dinamitero”, “portavoz de marca blanca”, “simio”, “mulo”, “antropoide”, “neandertal”, “mono”, “lacayo”, “rabioso”, “borracho”, “Rubiales de la izquierda”, “soberbio”, “macarra”, “chulo”, “pijo” y “quinqui”.

El Mundo, el medio que ha ido tras la madre de Puente, ha hecho uso, por ejemplo, de estos dos: "payaso" y "comediante".