El Gobierno enmarca dentro de la "pura cortesía parlamentaria" el saludo y breve intercambio de palabras mantenido este martes entre el jefe del Ejecutivo en funciones, Pedro Sánchez, y el líder de ERC, Oriol Junqueras, durante la sesión constitutiva del Congreso de los Diputados.

Junqueras se encuentra en prisión preventiva y está siendo juzgado por su papel en el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017 en Cataluña, pero ha podido participar en la constitución de la Cámara con permiso del Tribunal Supremo tras haber sido elegido diputado en las elecciones generales del 28 de abril.

En el Hemiciclo del Congreso, Junqueras se ha cruzado en un par de ocasiones con Sánchez, dado que los diputados debían levantarse del escaño para votar la composición de la Mesa de la Cámara en una urna colocada en la tribuna de oradores.

El "tenemos que hablar" de Junqueras

En un primer momento, y a iniciativa de Junqueras, se han saludado con un frío apretón de manos, mientras que la segunda vez que el diputado preso pasó por delante del escaño ocupado por Sánchez el jefe del Ejecutivo le volvió a saludar con un "¿cómo estás?". Junqueras le contestó, según fuentes presenciales: "Tenemos que hablar".

El PP ha difundido un vídeo en el que se ve cómo Sánchez responde a Junqueras. Los populares atribuyen a Sánchez haber contestado con un "no te preocupes", pero el vídeo no permite leer los labios al presidente con esa claridad.

El "no te preocupes" del presidente

Fuentes de Moncloa confirman que Sánchez sí pronunció ese "no te preocupes", pero no como respuesta a una invitación a charlar por parte de Junqueras, sino después de que éste se excusara por darle la mano, por si esto podía incomodar al presidente.

En cualquier caso, fuentes de La Moncloa no le dan más importancia a este episodio, que enmarcan en la "pura cortesía parlamentaria". Durante la sesión constitutiva, también se ha visto a Junqueras conversando con los ministros de Exteriores, Josep Borrell; Justicia, Dolores Delgado; Educación, Isabel Celaá, o Empleo, Magdalena Valerio.

Alguna de estas conversaciones, relatan testigos presenciales, fueron simplemente charlas informales de tipo personal sobre la manera en la que Junqueras mata el tiempo en prisión, sin entrar en cuestiones políticas.