Monago se suma a los barones 'populares' que huyen del 'apestado' Rajoy, pero él tiene sus propios 'pecados' que callar

Y es que esa es la explicación que dan en el ambiente político a la decisión del presidente extremeño. Como les contábamos en ELPLURAL.COM, el pasado viernes Monago creó, con categoría de consejería, un Gabinete de Presidencia. Al frente del cual puso a quien llevó su campaña y, desde entonces, dirige cada uno de sus pasos, el experto en comunicación vasco Iván Redondo. Esa misma tarde, se conocía el anuncio de la 'rebeldía' contra la subida del IVA a los productos culturales. Un 'desmelene' frente al poder establecido en el PP, desconocido en Monago y que ha sorprendido incluso a los suyos ¿Por qué esta reacción?

Un Rajoy 'zapaterizado'
Aseguran los analistas en Extremadura que la razón es la misma que ha impulsado a Aguirre, a Feijoo y a otros... Rajoy empieza a estar afectado del mismo síndrome que aquejó a Zapatero en sus últimos tiempos. La gente se aleja de él, porque no quieren ser relacionados con las políticas de recortes, los incumplimientos de programa... que ya están desgastando aceleradamente la imagen del presidente del Gobierno.

El problema con José Antonio Monago es que él lleva su propia carga. Y si bien es verdad que ahora mismo alrededor suyo se habla sobre todo de su 'valiente rebeldía' al ataque a la cultura que supone la subida del IVA, no lo es menos que este movimiento no acaba de tapar los incumplimientos y los problemas propios que los políticos de la oposición -lo que en Extremadura se reduce al PSOE, por el pacto 'antinatura' con Izquierda Unida que permite gobernar al PP-, le están recordando.

El primero, el más paradójico, es un recorte a las ayudas... ¡a la compra de libros escolares! En el presupuesto extremeño había una partida de cuatro millones y medio de euros para ayudar a la compra de los libros escolares. José Antonio Monago ha estrangulado esa partida, hasta reducirla en un 62% en los fondos de ayudas a los colegios públicos, y un 53% a los concertados. Una decisión, cuando menos sorprendente y, en apariencia, contradictoria con el espíritu que le lleva ahora a 'resistirse' a la subida del IVA. Ya que los beneficiarios serían los mismos. Porque el gobierno extremeño se ha comprometido también a mantener reducido el IVA del material escolar.

150 rutas suprimidas
En el mismo sentido de ayudar al mundo de la cultura y la educación, resulta igualmente sorprendente la decisión que ha tomado Monago de suprimir las rutas escolares. En Extremadura, para cumplir con el compromiso de escolarización universal, había una red de autobuses que aseguraban la asistencia a la escuela hasta los 16 años a todos los niños y jóvenes.

El gobierno de la Junta ha suprimido este año 147 de esas rutas. La situación en algunas comarcas es tan complicada que las asociaciones de padres han tenido que comenzar a reunirse para ver si les resulta posible económicamente fletar ellos mismos los autobuses, ya que si no, la única alternativa es llevarles en sus propios coches. A veces en recorridos de hasta 20 y 30 kilómetros.

El céntimo sanitario
Pero no son sólo las contradicciones entre algunas de sus medidas y su supuesto apoyo a la cultura. Llama también la atención en este giro del Monago 'rebelde' frente a Rajoy, que él tiene su propia lista de incumplimientos. El primero de ellos el céntimo sanitario. Un impuesto que el ahora presidente extremeño se comprometió a abolir cuando era candidato, como se puede ver.

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Compromiso que no sólo ha incumplido, sino que lejos de suprimir la tasa la ha llevado al máximo. Cuando se hizo con la presidencia de la Junta José Antonio Monago, el 'centimo sanitario' significaba para los extremeños un sobrecosto de su gasoil de 1,8 céntimos por litro, y de 2,4 céntimos en la gasolina. Ahora esa tasa está en el tope que permite el Gobierno central, 4,8 céntimos por litro.

Los impuestos sorpresa
Pero los medios y políticos extremeños están sacando en estas horas a José Antonio Monago otra lista de puntos en los que el presidente autonómico podría mostrar la solidaridad con la ciudadanía. En concreto, en impuestos que él ha implementado y que podría también reducir... o suprimir. Y que son impuestos generalizados e indiscriminados, que afectan a todos los ciudadanos, independientemente de sus ingresos.

Como les contamos en su momento, Monago impuso un impuesto a las bolsas de plástico que se entregan en los comercios de alimentación. En Extremadura cada ciudadano no sólo debe pagar por la bolsa, sino que también debe costear un impuesto de cinco céntimos por cada una de la bolsa de plástico en la que se lleve su compra.
 

Y luego está lo que se conoce entre los extremeños como la tasa Monago del agua. Dos euros que la Junta incrementa el consumo del agua de cada mes y que las compañías, que se han negado a 'tapar' la operación, especifican en los recibos (como muestra la factura que reproducimos), bajo el epígrafe "Junta de Extremadura canon saneamiento cuota fija".