La presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha puesto fin este miércoles a lo que previsiblemente ha sido la última sesión plenaria de esta decimotercera legislatura, y lo ha hecho lamentando que los diputados no hayan logrado su misión de "convertir en realidades políticas" las esperanzas de los electores y recordando que ahora deberán "rendir cuentas" ante la ciudadanía.

"Hace veinte semanas fuimos elegidos para representar a los españoles y convertir en realidades políticas sus esperanzas y sus ilusiones. No lo hemos conseguido, y en unos días rendiremos cuentas ante los ciudadanos, les pediremos de nuevo su apoyo y ellos decidirán quiénes volverán a ocupar estos escaños", ha señalado desde la Presidencia del salón de Plenos.

Batet ha deseado "la mejor de las suertes en el cumplimiento de sus responsabilidades" a los diputados de la próxima legislatura y ha mostrado su agradecimiento a todos los que desarrollan su trabajo en el Congreso.

Personalmente, ha querido agradecer a los diputados haberle permitido "el honor de presidir" el Pleno del Congreso, y también ha pedido disculpas por los errores que haya podido cometer en estos meses.

"Las personas podemos equivocarnos, podemos también cansarnos e incluso desfallecer, pero la democracia es más sabia, más constante y más fuerte que las personas", ha concluido, levantando la sesión entre los aplausos de diputados de los distintos grupos.