En el acto han participado una sección del Regimiento de Transmisiones y el secretario general del Estado Mayor del Ejército, Juan Valentín Gamazo, quien ha demandado que el orgullo por la bandera “crezca día a día” por ser el que “mejor representa a la nación”.

Caídos por Dios
El homenaje inicial y que levantó la polémica era a “la bandera y a los caídos por Dios y por España”. Así al menos, con esta lírica franquista, era como aparecía en el programa oficial de las fiestas de esta localidad toledana gobernada por el PP. Su alcalde, José Sánchez, ha asegurado que el acto era un tributo a “los caídos de todos los tiempos y no solo a los de la Guerra Civil”.

La República como excusa
La explicación que da Sánchez para la nomenclatura inicial es la de que se debió a un “error” tipográfico, por lo que se ha disculpado como principal responsable, alegando que no cayó en la cuenta “de la polémica que podía traer”, aunque entre sus justificaciones también ha añadido que “otras veces se han hecho homenajes a la República”.

Una calle para Jose Antonio
El caso de Méntrida se suma a una larga lista de agravios a la Memoria Histórica que han tenido lugar este verano. También en Castilla-La Mancha, concretamente en Horcajo de Santiago (Cuenca) el nuevo regidor del PP, salido de las urnas el 22 de mayo, ha decidido devolver su anterior calle, e ilegal de acuerdo a la Ley de Memoria Histórica, a su anterior dueño: José Antonio Primo de Rivera, fundador de la Falange.

Negación de monumentos
Otro caso sonado ha sido el de la alcaldesa popular de San Sebastián de los Ballesteros, en Córdoba, quien se negó en rotundo a inaugurar un monolito a los fusilados del franquismo en el cementerio municipal y que estaba comprometido por la anterior corporación.

Desmantelamiento de mausoleos
También han levantado mucha polémica los incidentes ocurridos en Poyales del Hoyo, en Ávila, donde el alcalde conservador desmanteló un mausoleo en recuerdo de varias víctimas de fusilamientos para después arrojar los cuerpos a una fosa común. Esta actuación provocó una manifestación en la plaza del pueblo, convocada por asociaciones de memoria histórica, y que acabó con altercados con los vecinos.