El líder del Frente Polisario saharaui, Brahim Ghali, de 71 años, permanece ingresado en un hospital de Logroño bajo una identidad falsa, desde el pasado mes de abril. La ministra española de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, ha justificado que fue admitido en España "por razones estrictamente humanitarias", aunque, según ha trascendido, no hubo unanimidad al respecto, al menos por parte del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que previó las consecuencias.
Ghali se habría registrado con el nombre falso de Mohamed Benbatouch y una identidad argelina para evitar problemas con la justicia española. La Audiencia Nacional le imputó en 2016 la comisión de delitos de genocidio, asesinato, torturas y desapariciones cometidos presuntamente contra la población saharaui disidente refugiada en los campamentos de Tinduf (Argelia). El juez José de la Mata admitió una denuncia a trámite en noviembre de 2012 interpuesta por la asociación Asadedh y tres víctimas contra 28 miembros del Frente Polisario y altos cargos del gobierno argelino.
Problemas respiratorios por coronavirus
El líder del Frente Polisario fue ingresado en un hospital de Logroño por los problemas respiratorios que sufre tras infectarse de coronavirus, y además padece un cáncer digestivo desde hace varios años.
La decisión del Gobierno de acoger a Ghali provocó un enfrentamiento sin prececentes con Marruecos, que vive un conflicto permanente desde la década de los 70 con el Frente Polisario por el dominio del Sahara Occidental, territorio actualmente ocupado en su mayor parte por el reino de Mohamed VI.
Militar destacado contra España, Marruecos y Mauritania
Brahim Ghali es el presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (Rasd) y secretario general del Frente Polisario. Ha participado de forma activa desde la década de los 60 en diferentes movimientos de liberación saharaui, liderando acciones militares contra España, Marruecos y Mauritania, países que han tenido intereses en el Sahara Occidental.
El líder del Frente Polisario jugó un papel decisivo en la lucha armada contra España al frente del Ejército de Liberación Nacional Saharaui cuando nuestro país controlaba esa zona del norte de África. Estos continuos enfrentamientos provocaron que el Gobierno español anunciase su intención de conceder mayor autonomía a los saharauis y celebrar un referéndum en 1975, un plan que no fue compartido por el reino de Marruecos.
Acusado de las muertes de pescadores canarios
La acogida al líder rebelde, nacido en Esmara en 1949, tampoco ha gustado a la Asociación de Víctimas del Terrorismo de Canarias (Acavite), que reclamó su detención inmediata, acusándole de ser el instigador de "los ametrallamientos, asesinatos, secuestros masivos y desapariciones de tripulaciones en alta mar de marineros canarios desde 1973 hasta 1986", en aguas que el Frente Polisario considera aguas saharauis.
Brahim Ghali, en esa época ministro de Defensa de la República Árabe Saharaui Democrática, es responsabilizado de los ataques contra pesqueros canarios que causaron la muerte del contramaestre Guillermo Batista Figueroa y el marinero José López, además del secuestro de marineros de las embarcaciones 'Saa', 'Las Palomas' o 'Garmo Mar'.
Señalado en atentados terroristas contra españoles
Ghali fue acusado, además, de la muerte de soldados españoles y del asesinato de ciudadanos en atentados terroristas, como el perpetrado contra la empresa Fos Bucraa o el secuestro de españoles en medio de las negociaciones con España. El líder del Polisario participó en la reunión oficial que los rebeldes saharauis mantuvieron con las autoridades españolas en 1975. En 1991, ante la mediación de la ONU para un referendum, Ghali fue uno de los dirigentes que se opuso a firmar el alto el fuego.
