La ley de Bienestar Animal del Gobierno de coalición corre serio riesgo de decaer. El articulado salido del Consejo de Ministros atesoraba una preciada sintonía que el PSOE quebró al incorporar una enmienda que excluía a los perros de caza del paraguas legislativo que otorga la norma. La respuesta de los socios que sostienen la coalición fue unánime: así, no la votarán. Desde que los socialistas se apoyaran en Partido Popular, Vox, PNV y Coalición Canaria para la maniobra, los morados presionan para que rectifiquen y rescaten el texto aprobado en Moncloa tal y como estaba. Este miércoles, en un último intento, Unidas Podemos ha registrado junto a Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), EH Bildu y Más País una enmienda transaccional para suprimir de la norma la propuesta del PSOE sobre los canes.

Los aliados parlamentarios del Gobierno advirtieron el pasado martes durante sus respectivas ruedas de prensa que, si bien la ley les seduce, la enmienda sobre los perros de casa empaña todo el texto y hace inasumible su aprobación. En consecuencia, han sumado fuerzas para ejercer presión y han registrado una enmienda transaccional conjunta para suprimir la del PSOE. “Hemos hecho un último intento de que el PSOE vuelva al texto inicial que salió del Consejo de Ministros y hemos presentado junto con ERC, EH Bildu y Más País una enmienda que lo que propone es la supresión del texto  del PSOE que excluye a los perros de caza de la Ley de Bienestar Animal”, ha explicado la secretaria de Organización de Podemos y secretaria de Estado de agenda 2030, Lilith Vestrynge. La dirigente morada espera que en las últimas horas los socialistas “vuelvan al texto inicial”.

Considera que aún hay tiempo, que “todavía les podemos convencer” para que rectifiquen. “Hay cuatro grupos parlamentarios, que son además los socios, que lo piden”, por lo que “creemos que se puede conseguir”. Además, ha subrayado que existe un amplio consenso social sobre la necesidad de proteger a los animales y, en concreto, a los perros.

Juantxo López de Uralde, diputado de Unidas Podemos y líder de Alianza Verde, ha esgrimido en declaraciones a los medios de comunicación que “entendemos no existe ningún motivo que explique que los perros de caza son distintos a otros perros”. Y ha añadido: “El único motivo es el miedo a la presión que pueda ejercer el lobby de la caza que tiene el PSOE, por esto firmaron esta enmienda de la vergüenza con el PP y con Vox”.

Rechazo rotundo

El diputado y líder de Más País, Íñigo Errejón, fue tajante: si el Grupo Socialista no “revisa” su enmienda y elimina la distinción entre perros de caza y “perros de casa”, con su bancada que no cuente porque supondría un retroceso en derechos de los animales que la formación verde no consentiría. Lo mismo ERC. “En ningún caso”, alegó el portavoz parlamentario, Gabriel Rufián, respaldarán una ley “"que olvida a animales que se utilizan como si fueran herramientas”. El único que dejó la puerta entreabierta fue Compromís, aunque se inclinan por el rechazo.

Por no contar, el PSOE no contaría ni siquiera con el apoyo del PNV. En su caso, se escudan en la “invasión competencial” a las comunidades autónomas: “Presentamos una enmienda a la totalidad, votamos en contra del dictamen en comisión y votaremos igual, en contra, en el pleno de mañana”.

Tampoco encontrarán plácet en la bancada de las derechas. La portavoz parlamentaria del PP, Cuca Gamarra, anunció el martes su negativa porque considera que la norma “va a generar muchísimos problemas” y no protegerá realmente a los animales. Iván Espinosa de los Monteros, de Vox, comunicó que su partido haría lo propio, pero por otro motivo bien distinto: “Es un disparate intentar humanizar a los animales desde un Gobierno empeñado en deshumanizar a las personas. Es un disparate que el Gobierno dedique un solo euro de los españoles a la creación de una nueva Dirección General llamada de Derechos de los Animales”.

Lo más parecido a un ‘sí’ que verá el PSOE si mantiene su enmienda es la abstención de Ciudadanos anunciada por su portavoz, Inés Arrimadas. Y tampoco, porque los naranjas se posicionarán en contra de modificar el Código Penal para incorporar las penas por maltrato.