Ni el conseller de Cultura, Ferran Mascarell, el antiguo miembro del PSC que Artur Mas fichó a bombo y platillo, ni tan siquiera el director del Centro Cultural de Cataluña, Jordi Casas, un hombre de Unió muy cercano a Durán, se acercaron al acto. Un hecho que en ambientes políticos y culturales sondeados por ELPLURAL.COM en Cataluña se apuntan como una señal del abandono de la promoción de las actividades culturales catalanas desde la llegada del gobierno de Artur Mas.  Más aún teniendo en cuenta las disculpas ofrecidas. El Conseller Mascarell ha dicho que “debería haber estado”, pero que ¡tenía confundido el día de la ceremonia! Lo del director del Centro Cultural no es menos sorprendente, se ha justificado diciendo que ¡estaba organizando actividades culturales!

El Centro Cultural en Madrid reduce su actividad en un 50%
Durante la presidencia de Montilla, la Generalitat impulsó la presencia de las actividades institucionales y culturales catalanas en toda España, en especial en Madrid. La mejor muestra, la actividad del Centro Cultural Blanquerna, la sede cultural del gobierno catalán en Madrid, la llamada ambaixada. En estos años, la media de actividades organizadas rondaba las 200. En este primer trimestre, sin embargo, los actos se han reducido drásticamente, hasta sólo una veintena.

Si estos datos se extrapolan a todo el año, apenas se acercarán a la centena, es decir, una reducción por encima de la mitad. Es más, casi todas estas actividades no están siendo organizadas por la Generalitat, sino por otras instituciones o empresas con sede en Cataluña, en especial editoriales, a las que se les permite el uso del Centro Blanquerna.

La Semana de la Cultura Catalana en Madrid cada vez más rácana
Pero este hecho se ve subrayado en la que hasta ahora era la gran llamada de lo catalán en la capital: la Semana de la Cultura Catalana, que se celebra en torno a la fecha de Sant Jordi. Tras 4 años en los que esta Semana se había convertido en una creciente fiesta de Cataluña, con más y más actividades organizadas en cada edición, la de este año, la primera organizada por el nuevo gobierno de Convergencia y Unió, ha decaído. Las cifras son incontestables. En la edición de 2010 se desarrollaron 43 actividades en 14 sedes distintas de Madrid, entre ellas el Museo Nacional Reina Sofía, la Residencia de Estudiantes, el Instituto Cervantes, la Filmoteca Nacional o el Círculo de Bellas Artes. Actividades en las que además participaron 36 diferentes organizaciones.

En 2011, en la que es la cuarta edición, estas cifras se ven radicalmente reducidas: se han desarrollado tan sólo 16 actividades y se ha contado con sólo 3 instituciones colaboradoras. Eso sí, el Círculo Catalán ha tomado un protagonismo absoluto  con actividades como el baile popular de fiesta mayor, el esbart dansaire o la bienvenida de la pubilla. Lo que es peor y temen más las fuentes políticas y culturales contactadas por ELPLURAL.COM, dado el ejemplo de lo sucedido en torno a la entrega del Cervantes a Matutes, la situación de abandono de la presencia cultural catalana fuera de Cataluña no parece ir a paliarse.