La presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, se ha preguntado dónde ha estado el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, al que ha señalado como "jefe" de su consejero de Políticas Sociales, Alberto Reyero, en la gestión de residencias.

En una entrevista en Cuatro, la dirigente madrileña ha sostenido que lo que se ha vivido es "una auténtica guerra", en la que la Administración autonómica ha estado "muy sola y con muy poca ayuda".

"¿Dónde está el jefe de Reyero que es Pablo Iglesias, además de estar echando gasolina en este debate y haciendo tanto daño? No nos ha ayudado ni a mi consejero, ni por supuesto a la Comunidad de Madrid... no han ido a un hospital, no han ido a una residencia. Por hacer ni siquiera nos han llamado", ha lanzado.

"Iglesias ni está ni se le espera"

Ayuso ha indicado que, durante el mando único, Iglesias "dijo que él iba a procurar cuidar las residencias, que era su responsabilidad, que creaba un mando único".

"Durante estos meses ha sido el jefe de mi consejero y ni está ni se le espera, ha tenido que ser uno y otro los consejeros de la Comunidad de Madrid (Políticas Sociales y Sanidad) los que se han tenido que poner solos al frente de una situación tan complicada", ha apostillado.

"Los políticos no decidimos quién muere"

Según el informe que se mandó a las residencias desde la Consejería de Sanidad -que el consejero de Sanidad de Ayuso dijo que se había enviado por error porque era “un borrador”- existía una normativa interna que recomendaba hacer un triage y dejaba sin posibilidad de atención médica a los ancianos en peor estado, ya que estos eran automáticamente rechazados por el hospital.

Díaz Ayuso ha vuelto a decir en la entrevista en Cuatro que era “un borrador” y ha denunciado la mediatización que está sufriendo la Comunidad de Madrid: “¿Por qué no se habla de lo que ha ocurrido en las residencias de otras comunidades, donde también ha habido protocolos, o de otros países? Sólo se habla de Madrid. Además, las acusaciones son falsas. Los políticos no decidimos quién muere o quién tiene que ir a un hospital, ésa es una decisión de los geriatras”.