Los principales líderes de Europa (Francia, Reino Unido y Alemania) y Estados Unidos, han pedido este lunes al gobierno ruso de Vladimir Putin que cese "inmediatamente" los ataques contra civiles en Ucrania, al tiempo que han acordado que la protección de la ciudadanía ucraniana "debe ser la mayor prioridad" en el marco del conflicto.

Al término de un encuentro telemático que han mantenido Joe Biden, Emmanuel Macron, Boris Johnson y Olaf Scholz, el portavoz del Gobierno alemán, Steffen Hebestreit, ha trasladado que los cuatro mandatarios han remarcado que los ataques en Ucrania contravienen el Derecho Internacional, por lo que han vuelto a reclamar a Moscú que retire a sus efectivos de Ucrania "completamente".

Hebestreit también ha informado de que Biden, Macron, Johnson y Scholz han abordado cómo proporcionar más apoyo humanitario a Ucrania, coincidiendo en que "cualquier esfuerzo diplomático para superar la crisis merece apoyo".

Tras dicho encuentro, Scholz ha remarcado que lo ocurrido en Ucrania es una "agresión inaceptable" contra el Estado y debe ser rechazada "con todas las posibilidades" de las que se dispongan.

"Ahora tenemos que esperar que nuestra clara postura, que nuestras sanciones (...) causen una impresión (en Rusia) y que esto abra un poco de espacio para los esfuerzos diplomáticos", señalaba el canciller alemán, quien ha apuntado a que "cada día" y "cada hora cuentan". "Tenemos que evitar que este baño de sangre continúe", ha concluido. 

Macron tilda de "cinismo insoportable" la propuesta rusa para los corredores humanitarios en Ucrania

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha considerado que la propuesta de Rusia de crear nuevos corredores humanitarios para civiles en Ucrania es "de un cinismo moral y político insoportable", después de un fin de semana marcado por los fracasos de iniciativas supuestamente pactadas entre las partes en conflicto. Una posición que también ha defendido el gobierno ucraniano de Volodímir Zelenski, ya que ha tildado de "absurda, cínica e inaceptable" la proposición rusa por tener como destino de evacuación para los civiles el territorio ruso o bielorruso.

El presidente francés, que habló por última vez con el mandatario ruso este domingo, ha lamentado que los esfuerzos diplomáticos en el conflicto no hayan sido la vía para lograr un alto en fuego sólido.   En este sentido, Macron ha considerado incluso que la situación empeora "cada día", si bien es partidario de mantener la "presión diplomática". En relación con los efectos directos que la guerra tendrá sobre Europa, el dirigente ha reconocido que "hay razones para preocuparse". Sin embargo, ha subrayado que "Francia no está en guerra con Rusia" y ha insistido en la necesidad de un frente común: "La conclusión de todo esto debe ser más Europa".