La entrada de los talibanes en Kabul ha dejado multitud de imágenes que no dejan de sorprender al mundo. Miles de personas tratan de huir del país ante la amenaza que supone la puesta en marcha de un nuevo régimen talibán. El periodista y excorresponsal en Afganistán, Antonio Pampliega, ha contado a través de un hilo de Twitter la angustiosa situación que está viviendo su amiga Nilogar Bayat, la capitana del equipo de baloncesto en silla de ruedas de Afganistán, quien trata de dejar el país y conseguir ser una de las personas evacuadas por el Gobierno español.

En su primer mensaje en la red social, Pampliega revela lo que Nilofar le escribió desde la capital del país: "'Los talibanes van a entrar en Kabul. Tenemos mucho miedo. Mi vida se acaba, Antonio. No me puedo quedar aquí'. Nilo trabaja en @ICRC (Comité Internacional de la Cruz Roja), es la capitana de la selección nacional de baloncesto en silla de ruedas y estudia derecho".  A través de la cadena de mensajes, el periodista ha querido revelar más datos sobre la situación de amiga Nilofar: "Está tratando de buscar un visado en las embajadas de Irán e India para salir del país. Pero, como siempre, necesita un dinero que no tiene".

Tras los intentos de su amiga por encontrar un sponsor que le permita financiarse la huida del país y empezar una vida nueva, el corresponsal publica una buena noticia. "Me acaban de escribir desde la Federación Española de Baloncesto para tratar de ayudar a Nilofar a salir de Kabul. Ojalá pueda subirse a ese A400 que va a enviar el Gobierno de España".

Poco después, el articulista trata de visibilizar la difícil situación a la que se enfrentará Nilofar si consigue salir del país. "Si logra subir a ese avión dejará atrás sus padres, a sus hermanos y a su prometido... La elección es jodida. Su vida o su familia", concluye en un duro mensaje. "Parece que también hay un hilo de esperanza para Nilofar. Desde el CSD (Consejo Superior de Deportes) me han pedido sus datos. El ministerio de Exteriores va a hacer todo lo posible para sacarla de allí", relata esperanzado.

En otro de sus mensajes, explica los avances que va teniendo el caso de la deportista. "Ya ha enviado todos los documentos", comenta mientras explica que están tratando de que pueda salir del país junto a su marido Ramish. "Si consigues sacarnos de aquí te estaremos agradecidos siempre", asegura esta al corresponsal.

Mientras continúan los trámites para que la baloncestista pueda salir del país, Pampliega ha compartido la bonita historia de amor de la pareja. "Se conocieron en el centro del @ICRC_af (Comité Internacional de la Cruz Roja de Afganistán) donde ambos trabajan. Son los capitanes de las selecciones de baloncesto de Afganistán en silla de ruedas. En un país como Afganistán, donde el amor es un tabú ellos han desafiado las tradiciones y se casaron por amor. Además, ambos sufrieron las consecuencias de la guerra civil entre los muyahidines. Ambos son discapacitados a consecuencia de las bombas", narra el informador.

Desde Twitter, el comunicador ha agradecido públicamente el apoyo que está recibiendo por parte de periodistas y deportistas para ayudar a Nilofar y su marido. "Han movido cielo y tierra para que sus nombres estén en esa lista que separa el futuro del abismo. Gracias, gracias y gracias", publica el periodista.

Aunque el complejo viaje de la pareja aún no ha acabado, Pampliega comparte que ha recibido la llamada de un club de baloncesto en silla de ruedas que ofrece, a Nilofar y su marido, una ficha para jugar con ellos. "Ahora sólo tenemos que montarlos en uno de esos dos aviones y sacarlos de aquel infierno", relata este esperanzado.

Sin embargo, cuando todo parece que va a salir bien, Pampliega recibe un nuevo mensaje de la deportista en el que le informan de su situación. "Nilo y Ramish, su marido, están en la entrada del aeropuerto. Tienen todos los salvoconductos. Los talibanes no la dejan pasar. Han comenzado a disparar al aire. Nilofar estaba llorando y me ha colgado el teléfono...", publica en redes sociales.

Posteriormente, el corresponsal logra volver a ponerse en contacto con Nilofar y esta le explica que se han desplazado hacia la puerta del aeropuerto militar donde pueden ver a los soldados norteamericanos pero los talibanes no les dejan entrar. Tiempo después, Antonio Pampliega anuncia la buena noticia: "¡¡¡¡Están dentro!!!! ¡¡¡Están dentro!!! ¡¡¡¡Están dentro!!!! ¡¡¡¡¡Les están comprobando los pasaportes y las acreditaciones!!!!! Dios, ¡¡¡¡¡¡sí!!!!!!”, publica visiblemente emociononado.

Muy agradecido, el periodista comparte en Twitter una imagen de la pareja desde el interior del aeropuerto mientras permanece a la espera del avión que les traiga a España. Aunque el informador se muestra muy contento por su amiga, este asegura que aún le quedan dos familias más que sacar del país.

Centenares de personas se acumulan en el aeropuerto de Kabul tal y como se puede apreciar en una de las instantáneas que Nilofar le ha enviado al periodista. Sin embargo, cuando todo parece que va a salir bien, un nuevo mensaje pone en alerta al periodista: "Nilofar me acaba de llamar desesperada. No hay nadie de España en el aeropuerto de Kabul. Que nadie ha ido a buscarla. 'Me mandan a Alemania, Antonio. Aquí no hay nadie de España. No encuentro al embajador'", se puede leer en su tuit.

Posteriormente, tras continuar intentando buscar una solución para su amiga, este explica que lo importante es que se suban a alguno de los aviones para salir de allí. "A mí me da igual. Yo quiero salir de aquí", le confiesa Nilofar al periodista.

En otro de los mensajes, este narra las últimas noticias que ha tenido de la deportista. "Antonio, me voy a Alemania. Si me quedo a esperar al avión de España me van a echar del aeropuerto porque no llega hasta mañana. Y no quiero volver a tener que pasar por lo mismo de hoy con los talibanes. Me voy. Hablamos desde Frankfurt'", comparte Pampliega.

A primera hora de este jueves el periodista ha publicado un nuevo tuit sobre la pareja. "Esperaba, al despertarme, encontrarme la foto de Nilo y Ramish en el avión... Pero siguen en KAIA (Aeropuerto Internacional de Kabul). El avión para Alemania aún no ha salido. Llevan horas esperando al sol. 'Hace muchísimo calor', me dice. Paciencia. No queda otra", explica Pampliega sin perder la esperanza en que finalmente ambos puedan llegar a España sanos y salvos.