El socialdemócrata Peter Pellegrini, primer ministro eslovaco, se encuentra ingresado en un hospital en su país con un cuadro infeccioso agudo, fiebre alta y problemas respiratorios. Este caso aparece tras la atmósfera de preocupación por los nuevos casos de coronavirus en Italia, donde ya han fallecido seis personas y hay más de dos centenares de infectados, y se extiende a los círculos políticos de toda la Unión Europea.

La pasada semana, el jueves y el viernes, estuvieron en contacto con Pellegrini los líderes europeos en la cumbre de presupuestos de la Unión Europea, y si finalmente resultase afectado por el coronavirus, conllevaría que todos los líderes que estuvieron en contacto con él entrasen en cuarentena, según indica el protocolo sanitario. Las autoridades eslovacas no han mencionado si se trata de una infección del coronavirus pero los síntomas podrían ser compatibles con este virus de Wuhan. Un portavoz de la Comisión Europea ha confirmado que la presidenta, Ursula von der Leyen y el Alto Representante, Josep Borrell, también participaron en la reunión europea y se encuentran perfectamente.

El primer ministro eslovaco ha tenido que cancelar toda su agenda a pesar de que falta menos de una semana para las elecciones. En su cuenta de Facebook ha publicado un mensaje y una fotografía en la que explica que ha estado “luchando con una extensa infección durante las últimas semanas”, lo que descartaría el posible caso de coronavirus.