La vicepresidenta de EEUU, Kamala Harris, asumirá temporalmente la presencia del país hasta que el presidente Joe Biden se despierte de una colonoscopia a la que se someterá este viernes en el hospital Walter Reed.
Aunque se trata de un procedimiento “de rutina”, tal y como informa la Casa Blanca, foma parte del profundo examen médico que el mandatario está atravesando este viernes, el primero desde que tomó posesión del cargo el pasado mes de enero.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, ha explicado que es una situación que no es nueva, ya que ocurrió en dos ocasiones en 2002 y 2007, cuando George W. Bush se sometió al mismo procedimiento. Sin embargo, es la pimera vez que el poder cae en una mujer.
“Siguiendo el proceso establecido en la Constitución, el presidente Biden transferirá el poder al vicepresidente durante el breve período de tiempo en que esté bajo anestesia. La vicepresidenta trabajará desde su oficina en el Ala Oeste durante este tiempo”, indicaba el equipo de la Casa Blanca.
Una vez conocidos los resultados de la prueba médica, el equipo de Biden dará a conocer los resultados del examen médico del presidente.
