Israel y Hamás han pactado una pequeña tregua de cuatro días en los que Israel no atacará territorio palestino a cambio de que la banda terrorista libere al menos a 50 personas.
Mes y medio después de que se recrudeciera la relación entre el país de Benjamín Netanyahu y Hamás en un escenario en el que Palestina ha sufrido las consecuencias de los incansables bombardeos llegados del otro lado de Tel Aviv, el conflicto alcanza ahora un punto clave, un periodo de paz de cuatro días -habrá que ver de qué manera se cumple y cómo vuelven las partes después de éste- en el que Israel y Hamás han llegado a un acuerdo a cambio de la liberación de al menos 50 mujeres y niños entre las casi 240 personas que tiene secuestradas el grupo terrorista.
El acuerdo ha sido producto de la mediación de Qatar, Egipto y Estados Unidos y entrará en vigor este jueves. El presidente del país norteamericano, Joe Biden, ha celebrado que de trata de un “testimonio de la diplomacia incansable y la determinación de muchas personas dedicadas en todo el Gobierno de EEUU para traer a casa a los estadounidenses”.
Además, ha mostrado su “aprecio” por el compromiso del primer ministro israelí -muy polémico y criticado por las acciones indiscriminadas contra la población civil palestina con el pretexto de que su objetivo es el grupo terrorista- a la hora de apoyar una “pausa prolongada” de cara a la entrega de ayuda humanitaria en la Franja de Gaza y así “aliviar” el sufrimiento de la población.
Sin embargo, ha subrayado que “es importante que todos los aspectos de este acuerdo se apliquen plenamente” y que él, como presidente, no tiene “mayor prioridad que garantizar la seguridad de los estadounidenses retenidos como rehenes en todo el mundo”: “Por eso, desde los primeros momentos del brutal asalto de Hamás, mi equipo de seguridad nacional y yo hemos trabajado estrechamente con socios regionales para hacer todo lo posible por conseguir la liberación de nuestro ciudadanos”.
Acuerdo Israel-Hamás
El acuerdo contempla la entrega de 50 rehenes por parte de Hamás a cambio de que Israel libere de sus cárceles a 150 presos, todos ellos niños y mujeres menores de 19 años. Durante esta tregua, las autoridades israelíes deberán cumplir con el compromiso de no arrestar ni atacar a nadie en la Franja de Gaza, así como de dejar de sobrevolar la zona sur del lugar la zona norte durante seis horas diarias. El acuerdo contempla también la entrada de una mayor ayuda humanitaria, entre la que se contempla bienes médicos y combustibles a todas las zonas de la Franja “sin excepción”.
El acuerdo, que se oficializará en las próximas 24 horas, se ha hecho público después de que el gabinete de emergencia de Israel haya aprobado tras una reunión de más de ocho horas el alto al fuego temporal con el compromiso de traer “a todos los secuestrados” a casa. Pero esto no implica el fin del conflicto.
Primer viaje internacional de Pedro Sánchez
El acuerdo coincide en tiempo con el primer viaje internacional de Pedro Sánchez como presidente de España después de sacar adelante su investidura. El líder del Ejecutivo acudirá a la zona del conflicto acompañado por el primer ministro de Bélgica, Alexander de Croo, según han informado fuentes de Moncloa, ya que el país belga cogerá el relevo del nuestro en la Presidencia de turno de la Unión Europea (UE) en enero.
En una nota remitida a los medios, Moncloa explica que los dos líderes europeos “abordarán con el presidente Herzog y el primer ministro Netanyahu, así como con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, el impacto del ataque terrorista perpetrado por Hamás contra Israel el pasado 7 de octubre”.
En la misma línea, las conversaciones estarán focalizadas en lo respectivo “a la protección de todos los civiles, la liberación incondicional e inmediata de los rehenes, el acceso de la ayuda humanitaria a la franja de Gaza, el respeto del Derecho Internacional Humanitario y la búsqueda de una solución política duradera para la región”. Todo ello, defienden desde el entorno de Sánchez, bajado en el reconocimiento de “dos Estados” -Israel y Palestina-, que “coexistan en paz y seguridad”.
