Una encuesta realizada por conjuntamente por la sociológica israelí Midgam y la organización de activismo ciudadano Avaaz ha concluido que la mayoría de los ciudadanos israelíes, en concreto el 54,3%, opina que su país no tiene por qué adherirse a las normas establecidas por el derecho internacional en sus ataques contra Hamás, frente al 39% que opina que sí debería hacerlo, con el fin de minimizar los daños civiles y proteger a la población palestina.

Otras preguntas de la encuesta desgranan que la mayoría de israelíes (61%) están a favor de la liberación de los niños palestinos presos en las cárceles israelíes, así como de la creación de zonas seguras en Gaza para proteger a los pequeños (56,9%), a cambio del retorno de los niños israelíes secuestrados por Hamás, lo que deja ver ciertas contradicciones con la respuesta mayoritaria a la primera pregunta, ya que dentro de las vulneraciones del derecho internacional se encuentran el uso de armamento prohibido, el castigo colectivo y el ataque de posiciones no demostradas como militares, siendo víctimas de estos dos últimos puntos, precisamente, los civiles y niños.

Desde Avaaz, a pesar de la respuesta mayoritaria sobre el derecho internacional, Fadi Quran, director de campaña de la organización y de esta encuesta, ha expuesto: "Cada quince minutos muere un niño bajo las bombas que llueven sobre Gaza. Esta encuesta demuestra que hay una voluntad civil para alejarse del camino de la violencia y proteger las vidas palestinas e israelíes. Más de la mitad de los israelíes está a favor del intercambio de niños retenidos por Hamás y de aquellos retenidos por el ejército israelí", en referencia a las respuestas de las otras dos preguntas.

"Para que el rescate de niños israelíes fuera posible, también estarían de acuerdo en establecer un corredor humanitario en Gaza. Nuestros gobiernos deberían estudiar esta opción para salvar la mayor cantidad de niños posible. Miles de personas han muerto ya en ambas partes de este conflicto y esto es solo el comienzo. No hay justificación para el asesinato de niños y la vulneración de la legislación internacional", ha proseguido.

"La seguridad no puede utilizarse como justificación para una guerra en la que valga todo y en la que se cometan crímenes contra la humanidad. Los resultados de esta encuesta deberían hacer despertar a toda la comunidad internacional para darse cuenta de que hay otro camino que los ciudadanos israelíes aceptarían, y debe tomarse antes de que sea demasiado tarde", ha zanjado.

A su vez, otra fuente de Avaaz expresa que "en contra de la retórica de Benjamin Netanyahu que sostiene que sólo cercando la franja por tierra, mar y aire soltarán a los rehenes, la mayoría de israelíes apoya el intercambio de niños palestinos detenidos en Israel a cambio de la entrega de los niños y familias retenidas por Hamás". "Esta solución, además de proteger a los más pequeños, serviría para comenzar a desescalar la tensión y acercar posturas", añade.

Preguntas de la encuesta de Midgam

Pregunta 1: Entre otras cosas, hay una propuesta sobre la mesa que dicta que Hamás liberará niños israelíes retenidos en Gaza si Israel hace lo propio con los niños palestinos que tiene presos en su territorio. ¿Estarías a favor de esta medida, o te opondrías a ella?

● 61.1% a favor.

● 26.8% en contra.

● 12.1% no sabe / no contesta.

Pregunta 2: Además de la propuesta de intercambio de rehenes menores de edad, hay otra proposición consistente en la creación de zonas seguras y corredores humanitarios para proteger a los niños en Gaza, controlados por Naciones Unidas. ¿Estás a favor de esta propuesta o te opones a ella?

● 56.9% a favor.

● 29.8% en contra.

● 13.4% no sabe / no contesta.

Pregunta 3: ¿Estás de acuerdo en que, en la guerra contra Hamás, Israel debería cumplir con el derecho internacional y tomar todas las precauciones necesarias para minimizar al máximo posible el daño a niños y civiles?

● 39.6% de acuerdo.

● 54.3% en contra.

● 6.1% no sabe / no contesta.

Grandes contradicciones

En conclusión, esta encuesta revela dos visiones principales. En primer lugar, que los ciudadanos israelíes encuestados están mayoritariamente a favor de poner medios para proteger a los niños, así como de liberarlos y devolverlos seguros a sus respectivos países mediante los mencionados intercambios y mediante el establecimiento de corredores humanitarios independientes. 

Pero en segundo lugar, la tercera pregunta revela una fuerte reticencia a confiar en Hamás y deja patente el deseo de los encuestados de utilizar todos los medios para acabar con ellos, aunque se vulneren las leyes del derecho internacional en el proceso, lo cual entra en contradicción con la protección a los niños que el 59% de los encuestados apoya.

Sintetizando los resultados, puede desvelarse un sentir común en los israelíes preguntados: es necesario tomar medidas para proteger a los niños, pero Hamás es percibido como un enemigo tan grande que ha de lucharse contra ellos por todos los medios, incluso si las vías utilizadas incurren en violaciones de la legislación internacional y suponen la muerte de más civiles.