La primera sesión de la vigésima legislatura del Bundestag alemán se ha iniciado con polémica este martes motivada por el malestar generado por la presencia de la ultraderechista Alternativa para Alemania (AFD), otra vez, en la cámara parlamentaria, desde que consiguieran entrar en 2017, por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial. 

El Bundestag ha crecido en esta legislatura, de 709 diputados a 736, lo que ha obligado a instalar cuarenta bancas adicionales. Los liberales de la FDP (Partido Democrático Liberal) habían pedido un cambio para evitar sentarse junto a los diputados de la ultraderechista AFD. Una actitud que, sin embargo, ha afeado el portavoz de la centroderechista Unión Demócrata Cristiana Alemana (CDU), Michael Grosse-Bröme, quien les acusó de "un toque de arrogancia en el poder" y de estar movidos sólo por el "interés propio".

 

La cámara rechaza al presidente honorífico de la ultraderecha

El otro asunto que ha calentado la primera sesión del Bundestag ha sido la elección del presidente honorífico, que por tradición desde hace siglos recae en el parlamentario de mayor edad, en esta ocasión, Alexander Gauland, de la ultraderechista AFD, que tiene 80 años. Pero la cámara alemana se ha saltado esta costumbre al rechazar el nombramiento y optar por Wolfgang Schäuble, de la centroderechista Unión Demócrata Cristiana (CDU), en medio de las protestas de la ultraderecha, que lo ha considerado " una burla de la democracia" y ha pedido a la Unión Europea que abra un proceso legal contra Alemania "por la discriminación a la oposición".

Wolfgang Schäuble, de 79 años, en su discurso tras su nombramiento, ha abogado por la unión en lugar de la división y ha recordado los principios que deben mover a los miembros del Bundestag: representar los intereses de todos los ciudadanos. "Siempre hay que preguntarse si escuchamos lo suficiente a la población", ha afirmado.

 

Merkel, en la tribuna

La canciller saliente Angela Merkel ha tomado asiento en la tribuna junto a la expresidenta del Bundestag Rita Süssmuth (CDU), y el presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier (SPD). En esta sesión se espera que se elija como sucesora para dirigir la cámara a la diputada socialdemócrata Bärbel Bas, en representación de la fuerza más votada en los pasados comicios generales. De ser así, sería la tercera mujer en presidir el parlamento tras la socialdemócrata Annemarie Renger y la cristianodemócrata Rita Süssmuth.

También se elegirán los vicepresidentes de la cámara de todos los partidos parlamentarios, que se espera reciban apoyo mayoritario, a excepción del representante propuesto por la ultraderechista Alternativa para Alemania (AFD).