El presidente de Vox en Zamora, Javier Alcina, ha anunciado a través de un comunicado su dimisión de los cargos que ostenta dentro de la formación y el abandono total del partido que preside Santiago Abascal, aunque no ha explicado las razones.

Según ha afirmado en el documento, la determinación de dejar Vox "no ha sido fácil" pese a que ya se lo ha comunicado a la Secretaría Nacional. "Pienso que, hoy en día, mi marcha es mejor que mi permanencia", ha explicado.

Alcina ha asegurado que la decisión, "aunque pueda parecer poco comprensible", es "la que la situación exige en este momento" y por eso ha querido agradecer el trabajo realizado a simpatizantes, afiliados y apoderados durante los comicios de abril y mayo.

Otro golpe a las listas del 10N

Al contrario que Malena Contestí, ex cabeza de lista de Vox en Baleares, Alcina no ha hecho públicos los motivos. Pero eso no palia el torpedo lanzado a la linea de flotación de Vox, que ve cómo sus candidatos abandonan el barco a apenas unos días del plazo tope para registrar candidaturas.

El pasado martes, la diputada nacional de Vox Contestí renunció a encabezar nuevamente una lista electoral de cara al 10N y se dio de baja del partido con una carta que resultó más dura que cualquier columna de opinión contra la formación de Abascal que se haya publicado hasta la fecha.

Contestí cofundó Actúa, formación con la que Vox rubricó una coalición electoral en Baleares. En su misiva denunció que todos aquellos ideales por los que decidió entrar en política tales como la unidad de España, la lucha contra el secesionismo, los derechos linguísticos, la libertad económica han sido defenestrados por el partido. “Aquella ilusión inicial se ha tornado poco a poco en una profunda decepción tras la coalición electoral que provocó mi llegada a Vox, decepción derivada de la imposición de un dogmatismo que golpea como un yunque en todos aquellos ideales que parecieron hacer a Vox necesario”, lamentó.

Los “múltiples escándalos de supuestas irregularidades que no solo no se investigan sino que se protegen, la exclusión y el insulto constante a los demás partidos, demagogia, homofobia y extremismos varios” son algunos de los motivos que provocaron su decisión: "He sentido profunda vergüenza viéndome relacionada con un oportunista independentista como Salvini".

Y es que, considera que en Vox “lo importante es hacer ruido para salir en prensa” y con tal de obtener esa victoria, “todo vale, incluso la manipulación”: “Una foto con la bandera del movimiento gay es motivo de expulsión del partido”, aquejó; y denunció que se ha vinculado “directamente el terrorismo con la inmigración” aún a sabiendas de que se “manipula la realidad”.

“Vox es un movimiento extremista y antisistema”, sentenció Malena Contestí.