Este miércoles ha tenido lugar en La Moncloa una rueda de prensa dedicada a explicar las claves de cara a la cumbre de la OTAN que acogerá España los próximos 29 y 30 de junio. La ministra de Defensa, Margarita Robles, y el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, han sido los encargados de detallar la preparación del Gobierno de cara a la reunión de los países transatlánticos.

Coincidiendo con el 40 aniversario de la adhesión de España a la Alianza Atlántica, el Ejecutivo encara una cumbre clave para reforzar la imagen, interior y exterior, tras una mini crisis provocada por el fracaso en Andalucía y la mayoría absoluta de Juan Manuel Moreno Bonilla. Pedro Sánchez necesita reforzar su liderazgo y la cumbre de la OTAN es una brillante oportunidad para ello. Tanto Robles como Albares han querido repetir y reforzar la idea de que esta cumbre debe suponer un "orgullo" para España.

Por su parte, Robles ha destacado que España "es un aliado clave para trabajar por la paz" y ha reflejado que los miembros de la OTAN, debido a la invasión de Ucrania, se han dado cuenta de "la necesidad de contar con un paragüas de protección ante posibles ataques externos". También ha querido destacar que "es un éxito de España y pone de relieve la confianza política que tienen los socios" en nuestro país. Asimismo, ha añadido que "en esta cumbre se aprobará un nuevo concepto estratégico que garantizará la seguridad de los miembros de la OTAN durante la próxima década". Tal y como ha señalado Margarita Robles, "nace una etapa nueva ya que la seguridad no está garantizada". Por ello, ha invitado a la reflexión: "La paz es una prioridad y desde la OTAN y la UE lo estamos haciendo".

Sobre las críticas de Ione Belarra y la mala imagen que puede dar en el exterior que miembros del Gobierno alcen la voz contra la cumbre, Robles ha indicado que "las declaraciones personales son respetables pero no comprometen al compromiso de España" con sus socios.  También ha tenido palabras para el PP y Alberto Núñez Feijóo y sus acusaciones contra el Gobierno por su falta de transparencia sobre el eventos. Los ministros han dejado claro que la organización depende en su totalidad de la OTAN: "El PP sabe perfectamente que este Gobierno ha tratado las políticas de defensa como de estado. La mejor política de estado es apoyar la cumbre y que se sienta orgulloso de la celebración en España", ha indicado Robles.

Las amenazas del flanco sur

Uno de los puntos donde más incidencia se ha puesto ha sido el peligro que representa el flanco sur. La presencia, tanto militar como política de Rusia en países de África, la pobreza del continente, el uso político de la inmigración ilegal y la amenaza terrorista, son puntos que tendrán su propio aparte en la cumbre. José Manuel Albares ha subrayado que entre los invitados a la cena a nivel de ministros de Exteriores que se celebrará el miércoles, figuran los de Jordania y Mauritania y el problema del sur se tratará "específicamente".

El titular de Exteriores, al igual que Robles, se ha mostrado orgulloso de España y su "capacidad y fiabilidad logística para acoger una cumbre de esta envergadura". Asimismo, Albares se ha referido a los problemas que puedan surgir a la población madrileña a raíz de los dispositivos de seguridad preparados para la cumbre. Por ello, ha pedido "colaboración vecinos de Madrid" y les ha definido como "papel fundamental en el éxito ya que son indispensables". Por otra parte, ha pedido disculpas por ello: "El prestigio de España supera cualquier inconveniente. Todos juntos demostraremos que los españoles podemos estar a la altura de los acontecimientos", ha añadido

También ha asegurado la presencia del presidente del Gobierno y los ministros de Exteriores y Defensa, ya que son los representantes que participan en las cumbres que organiza la OTAN "desde hace 70 años".