Felipe VI ha pronunciado este miércoles el discurso de Navidad más complicado de su reinado. Al margen de la situación de su padre, Juan Carlos I, ha entrado de lleno en reconocer y recordar el trabajo de los sanitarios y las víctimas durante esta crisis provocada por la covid-19.

Sin embargo, las palabras del rey no son lo único destacable. El mensaje navideño ha estado cargado de pequeños detalles con el objetivo de reforzar su alocución.

Ataviado con un traje gris marengo, camisa blanca y corbata azul, el monarca tenía en el eje central unas banderas de España y de la Unión Europea.

Guiño al Funeral de Estado Civil

En el lado derecho del Salón de Audiencias del Palacio de la Zarzuela, es decir, a la izquierda de la imagen, se ha podido observar un ejemplar de la Constitución Española y una fotografía del Homenaje de Estado a las Víctimas de Covid-19 y reconocimiento a la sociedad, celebrado el pasado 16 de julio en el Palacio Real.

En la imagen se puede ver cómo la Princesa de Asturias, Leonor, y Felipe VI depositan rosas blancas en el pebetero instalado en el centro del Patio de Armas.

La derecha criticó la forma en la que el Gobierno quiso recordar a las víctimas de la pandemia al no optar por un funeral católico, impropio de un Estado aconfesional.

No obstante, Casa Real ha querido compensar el simbolismo de la imagen flanqueando al rey en el lado derecho de la imagen un belén de la colección privada y un árbol de Navidad.

Por su parte, en las paredes se pueden ver los cuadros que se encuentran de manera permanente en la sala.