La dirección nacional del PSOE ha echado el freno al posible acuerdo que se estaba cocinando en la ciudad autónoma de Ceuta, que iba a unir, en un mismo Ejecutivo, al Partido Popular, ganador de las elecciones en el territorio, a los propios socialistas, y al partido local de izquierdas MDyC (Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía), con el objetivo de "darle a la ciudad una gobernabilidad y estabilidad". Desde Ferraz, han frenado este posible pacto, alegando una justificación en clave nacional: "Con el PP de Feijóo es imposible. Siguen instalados en el insulto, la mentira y están absolutamente en shock tras el resultado electoral. Nunca el PP estuvo más solo, y eso tiene un nombre: Feijóo. Necesitan un buen rato en el rincón de pensar".

Al ser preguntado por estos pactos, antes de que los socialistas se cerraran en banda a su constitución, el portavoz del Gobierno ceutí, Alejandro Ramírez (PP), expuso que "se le daría la pertinente publicidad" y que "se mantendría la transparencia como no puede ser de otra manera”, dando por sentado, erróneamente, que el acuerdo terminaría por culminarse.

Las motivaciones principales que llamaban a la construcción del macroacuerdo eran, también en palabras del portavoz del Gobierno de la ciudad autónoma, "la estabilidad y la gobernabilidad en una legislatura crucial para el desarrollo de Ceuta", y en la que a los 'populares', a pesar de ganar las elecciones, le faltaban 4 votos en la Asamblea para sumar los 13 que otorgan la mayoría absoluta. Desde la bancada socialista, por otra parte, apuntaron que si con sus votos se suman 15 en total, "no es necesario incluir a nadie más en el Gobierno”, y mostraron su preocupación de que si se constituía un tripartito, el PP podía "despejarles de la ecuación".

Cabe destacar que la suma de PP y Vox sería suficiente para un gobierno de coalición entre la derecha y la extrema derecha, pero la puerta a esta posibilidad ha estado cerrada en todo momento, prefiriendo buscar otras opciones como la del macroacuerdo. Sin embargo, todo queda en saco roto después de la negativa de Ferraz.

"Con el PP de Feijóo, imposible"

El inédito acuerdo entre las dos principales fuerzas políticas de la ciudad (y de la política española en general) parecía estar garantizado después de que los 'populares' ceutíes confirmasen que estaban conversando con los socialistas y con otras formaciones locales para formar un Ejecutivo que dejase fuera a la extrema derecha. En ningún momento fue calificado de preacuerdo ni se avanzó su consecución, pero sí se destacaba que los contactos estaban llegando a buen puerto. Sin embargo, el PSOE de Ceuta ha ratificado la posición de la dirección nacional socialista, y ha publicado un comunicado en el que niegan, incluso, que haya existido acercamiento alguno al PP para negociar el Ejecutivo.

"Los socialistas ceutíes hemos demostrado sobradamente nuestra apuesta por el diálogo y nuestro compromiso con la estabilidad de Ceuta, pero descartamos pactar con quien tiene la mentira y el insulto como únicos argumentos", ha señalado Juan Gutiérrez, secretario general de los socialistas ceutíes. Sin embargo, huelga recordar, las palabras del propio dirigente hace tan solo unos días, cuando sí que se mostraba dispuesto a alcanzar un acuerdo de coalición con los 'populares' de Juan Vivas. "El PSOE no va a dar apoyos puntuales. Vamos a trabajar desde dentro, y vamos a hacer un gobierno de coalición", argumentó la semana pasada.

Resultados electorales en Ceuta

El panorama político ceutí quedó muy dividido tras las elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo. El popular Juan Vivas, que ha gobernado con mayoría absoluta durante varias legislaturas, se impuso en las urnas, pero no con la holgura a la que acostumbraba en otro tiempo. Obtuvo 9 ediles, lejos de los 13 necesarios para la mayoría absoluta. En segundo lugar terminó el PSOE, con 6 electos, y el podio lo cerró Vox con cinco. MDyC consiguió tres parlamentarios, y Ceuta Ya! cerró el mapa con dos.

A la luz de estos resultados, cuadraban dos posibilidades: el Ejecutivo de coalición entre el PP y la extrema derecha, que sumaba un edil más que la mayoría absoluta, o una gran coalición entre las dos fuerzas más votadas. El primer posible acuerdo quedó bloqueado inicialmente por los propios 'populares', con el objetivo de "no traspasar ciertas líneas rojas y de perjudicar los derechos de colectivos vulnerables", y se estaba buscando constituir el segundo alegando a la gobernabilidad y la convivencia de la ciudad autónoma. Sin embargo, tampoco va a darse, tras la negativa de Ferraz. Por ende, Ceuta tiene ahora un futuro político incierto, con las negociaciones rotas y sin pactos a la vista.