La existencia de una especie de ‘UCO patriótica’ nacida con el objetivo de desestabilizar al Gobierno de España hasta hacer caer a Pedro Sánchez parece cada vez más probable.
A las informaciones publicadas en exclusiva por ElPlural.com sobre el fichaje de Juan Vicente Bonilla por parte del Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso en octubre de 2023 y su posible pertenencia a un conjunto de personas que estarían actuando de manera clandestina para derrocar al Jefe del Ejecutivo central, se suman voces jurídicas que explican algunos pormenores del modus operandi que habrían llevado a cabo ese conglomerado de agentes con el objetivo de tumbar a Sánchez.
El abogado Jacobo Teijelo ha contado en las últimas horas durante una intervención en el programa de Cuatro Todo es Mentira que Bonilla formaba parte de un grupo de Whatsapp cuyos integrantes se organizaban para debilitar a Moncloa. “Vamos a por los del PSOE, vamos a por Koldo, vamos a por los de arriba”. Este sería uno de los mensajes que contendrían estas conversaciones y que demostrarían que, efectivamente, varias personas se habrían organizado para hacer caer al secretario general de los socialistas.
Otros miembros de la Guardia Civil llevaron a los juzgados la presunta existencia de esta ‘UCO patriótica’ a través de una denuncia a la que tuvo acceso este medio de comunicación. En ella señalan al agente mencionado unas líneas más arriba y que terminó en la administración de la Puerta del Sol como titular de la Gerencia de Seguridad del Servicio Madrileño de Salud, ente público adscrito a la Consejería de Sanidad.
Por este puesto, al que llega después de haber sido jefe de Fuentes de la UCO, uno de los primeros investigadores del fraude de los hidrocarburos que concluyó con la imputación de Koldo García y José Luis Ábalos, Bonilla cobra una retribución de 84.268,32 euros.
“Otros nombres relevantes”
Según el abogado Teijelo, es posible demostrar la existencia del mensaje en el que el antiguo alto cargo de la Benemérita dice a un “confidente suyo” que van a ir a por el principal partido del Gobierno de coalición, el exministro de Transportes y Koldo. Cabe recordar que tres meses después de aquellos hechos, Bonilla aterrizó en el equipo de Ayuso.
“Hemos planteado una nulidad de actuaciones porque hay una grabación de un miembro de la UCO a un confidente suyo (…) Está en el procedimiento”, explica el abogado, que subraya el fichaje del protagonista de estas líneas por la región. “Es un hecho relevante”, evidencia, mientras reconoce la aparición de “otros nombres relevantes de la UCO en ese mismo chat”. Sin embargo, relata, a ellos “no se los toca porque ya no estaban allí en el momento de la investigación”. “Pero también tenían comentarios extraños”.
De la Guardia Civil al gobierno de Ayuso
Desde que se filtraran mensajes privados de Pedro Sánchez y José Luis Ábalos reconociera que él había consentido la publicación de los textos, la sospecha de que existía una suerte de ‘UCO patriótica’ para hacer caer al Gobierno de España a cualquier precio empezó a cobrar fuerza. Sin embargo, fue la información publicada por ElPlural.com acerca del fichaje de Juan Vicente Bonilla la que encendió más las alarmas.
Según fuentes consultadas por este periódico, el ahora cargo en el Gobierno de la Comunidad de Madrid habría “ocultado información crítica” en los sucesivos procedimientos que lograban incoar desde la Guardia Civil para beneficiar al Partido Popular. Así consta en la ya mencionada denuncia, que llegó al Juzgado Central de Instrucción Nº5 y que acusaba al actual titular de la Gerencia de Seguridad del Servicio Madrileño de Salud de instrumentalizar las causas en beneficio del PP.
Lejos de ser el único que habría obrado de esta manera, siempre según la parte denunciante, a su nombre se suma el de una serie de guardias civiles que estarían obteniendo información directamente de las bases de datos del Cuerpo, asesorando en técnicas de contravigilancia e investigaciones para beneficiar al partido que gobierna con mayoría absoluta en Madrid.
Si la atención se queda en los mensajes, hay que señalar también que Diario Red publicó una cadena de Whatsapp de Juan Vicente Bonilla en la que queda demostrado que el agente de la UCO presionó en 2019 a un confidente de la trama hidrocarburos para que consiguiese un empleo a su expareja.
Con todo, el fichaje de Juan Vicente Bonilla por parte del Gobierno de Ayuso no es el único indicio que apuntan a una posible ‘UCO patriótica’. Los contantes errores supuestamente accidentales en algunos de sus informes -hasta 37 según las cuentas de la Abogacía del Estado en uno de los informes contra la Fiscalía General del Estado-; las también frecuentes filtraciones a medios conservadores de datos personales o causas secretas; y la evidente tendencia a realizar investigaciones con visos de inquisición retroactiva pese a ser algo que está expresamente prohibido por ley, son otras de las líneas que aumentan las sospechas.