El electorado de Vox en este 10 de noviembre es motivo de estudio por parte de muchos analistas. En algunos pueblos y municipios rurales tanto de Andalucía como de Madrid, muchos jóvenes se han decantado por el partido ultraderechista porque los dos grandes “se han dedicado a chupar del bote”.

Esta es una de las respuestas que El Confidencial y El Mundo han recabado de algunos electores de Vox en municipios rurales tanto de Andalucía como de Madrid. En el caso de la capital de España, pueblos de la sierra oeste han otorgado su apoyo a la ultraderecha porque “la gente está hasta las narices de aguantar al PP y al PSOE”.

Este es el lamento de Goyo, un autónomo entrevistado por El Mundo, y que se queja de que los dos grandes partidos “no solucionan nada”, poniendo Cataluña como ejemplo. Pero la argumentación pasa inmediatamente a la inmigración. “La gente está harta de las ayudas a los inmigrantes. Los moros viven como Dios, se tiran todo el día en la calle y viven de eso”, subraya.

Este es el ejemplo de miles de vecinos de municipios rurales pertenecientes a la sierra oeste de Madrid como Colmenar, Sevilla la Nueva, Navalagamella o Villamantilla. La ultraderecha obtuvo el más del 25% de los votos y ayudaron a auparlo hasta los 52 escaños que ha obtenido en esta repetición electoral.

Es normal el cansancio de la gente”, argumenta un hostelero de Colmenar, que acusa a Partido Popular y PSOE de “chupar del bote”. “Yo he votado al PP, pero a mí Abascal me encanta, es español y defiende la bandera”, continúa. Además, otro matrimonio considera que “habla claro de la inmigración” porque “esto está lleno de moros y viven gratis”.

Otro vecino de la localidad que dice “no ser de derechas”, afirma categóricamente que “los marroquíes tienen muchas ayudas, subvenciones por hijo, para pagar el alquiler, los libros del colegio…”, explica. En muchos de estos pueblos hay un número considerable de inmigrantes debido a la existencia de infinidad de fincas, donde estos desarrollan diversas labores.

El alcalde de Navalagemlla, en declaraciones a El Mundo, reconoce que “un 20% de los vecinos son inmigrantes” y vincula el ascenso de Vox a la “jugada de Sánchez de sacar a Franco del Valle de los Caídos”. “Aquí la gente es de derechas y el votante del PP se ha ido a Vox”. Considera que Abascal ha defendido “con moderación” la unidad de España mientras que el PP “ha mirado para otro lado” con la exhumación de Franco.

En Andalucía, “es la moda”

“He votado a Los Verdes y ahora a Vox”, cuenta Enrique, de 20 años, a El Confidencial. Este joven reside en Los Palacios y Villafranca, una localidad sevillana en la que gobierna por mayoría absoluta un alcalde de Adelante Andalucía. Este 10 de noviembre, pese a la fortaleza histórica del PSOE en este enclave, Vox quedó segunda, a tan sólo 500 votos de los socialistas.

Enrique ha votado cuatro veces en su vida y sus votos han ido a parar a partidos tan diversos como Adelante Andalucía, Los Verdes en las andaluzas, Ciudadanos en las generales y Vox en la repetición del 10 de noviembre. “No me gustaba ninguno y Ciudadanos me ha defraudado, en plan veleta”. Ahora vota a Vox porque “son lo único distinto” pese a no estar de acuerdo con muchas cosas como los recortes que propone al colectivo LGTBi.

El partido ultraderechista ha arrasado en pueblos donde la renta es considerablemente menor a la media nacional según los indicadores. En Los Palacios, por ejemplo, muchos de los cuestionados por el citado medio no se explican cómo hay una diferencia tan escueta entre el PSOE y Vox. “Eso será en otro sitio”, dice un jubilado sevillano.

Sin embargo, cuando se cambia de horquilla de edad, la cosa cambia. Los más jóvenes admiten que votar a Vox es habitual entre los de su generación. “Es la moda”, añade Luis Manuel, de 18 años, aunque él ha asegurado que no lo hizo. “Es guay”, dice otro joven admitiendo que toda la información le llega a través de las redes sociales y rechaza cualquier otra forma de consumirla.