Este martes, el Gobierno ha aprobado en el Consejo de Ministros el proyecto de Ley de Garantías de las Libertades Sexuales -más conocido como la Ley del 'sólo sí es sí’-, que castiga todo comportamiento sexual sin consentimiento, que aúna todos los delitos sexuales en uno solo de agresión y que penaliza a los proxenetas. 

Una ley que se aprueba en un contexto en el que los datos oficiales revelan una tendencia al alza en las agresiones sexuales con penetración. 

En concreto, según los últimos datos oficiales conocidos, correspondientes al primer trimestre de 2021, estos delitos por violación aumentaron un 24,6% con respecto a los 321 que se habían contabilizado entre octubre y diciembre del año anterior.

De este modo, se registraron hasta 426 delitos de agresiones sexuales con penetración en apenas 90 días (de enero a marzo de 2021). Es decir, produciéndose una media por día de casi 5 violaciones cada 24 horas (4,7 al día). 

Son datos oficiales del Ministerio del Interior recogidos en el último Balance Trimestral de Criminalidad, que también alerta de un aumento de los delitos contra la libertad sexual. Y es que en comparación con el mismo periodo del año anterior, los delitos por violación aumentaron un 11,2%, teniendo en cuenta que, a partir del 15 de marzo de 2020, en España se activó un estado de alarma que obligó a los ciudadanos a confinarse en sus casas durante semanas.

El balance de Interior, recoge, en cifras generales, un aumento de los delitos contra la libertad sexual. En total, en el primer trimestre del año 2021 se han contabilizado 3.448, lo que supone un aumento del 7% con respecto al mismo periodo de 2020, en el que se registraron 3.223.

También supone un aumento, en este caso de un 10%, con respecto al último trimestre de 2020, cuando se registraron 3.086 delitos contra la libertad sexual.

Irene Montero celebra la ley

Ante estas terribles estadísticas y respecto a la aprobación de la Ley de Garantías de las Libertades Sexuales, la ministra de Igualdad Irene Montero ha celebrado que por fin se ponga el consentimiento en el centro del debate.

"Eso significa que solo tú decides sobre tu cuerpo y tu sexualidad, te libera de tener que demostrar que te has resistido, que hubo violencia o te sentiste intimidada", ha subrayado.