Pablo Echenique dice adiós al Congreso de los Diputados. El hasta ahora portavoz del Grupo Confederal Unidas Podemos-En Comú Podem-Galicia En Común dejará la política tras no integrarse bajo el paraguas de Sumar, puesto que era una de las líneas rojas del resto de partidos que componen la plataforma de Yolanda Díaz. El dirigente morado, en su intervención en la Diputación Permanente, ha reivindicado la labor de Irene Montero al frente del Ministerio de Igualdad, antes de concluir su intervención con un alegato contra la discriminación de las personas con discapacidad. "Es una vergüenza que después de cuatro años con el primer portavoz parlamentario en silla de ruedas, el Parlamento no haya mandado un mensaje claro a la sociedad", ha espetado. Echenique solicitará su reingreso en el CSIC con efecto inmediato. 

El portavoz parlamentario de Unidas Podemos ha cerrado su hoja de servicio en la política este miércoles. En la sesión de la Diputación Permanente del Congreso de los Diputados, Pablo Echenique ha lanzado su último discurso en la Cámara Baja antes de regresar a las ocupaciones previas a su incursión en la vida pública española. “Hoy es mi última intervención y aquí acaba mi viaje”, ha arrancado el exdirigente morado, quien a continuación avanzaba que “en unos días” solicitará su reingreso como “científico” para volver al servicio activo en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

Una buena parte de su intervención la ha dedicado para un hecho que para muchos ha pasado desapercibido, pero no para Echenique. Ha denunciado en su último alegato parlamentario que es una “vergüenza” que, después de cuatro años como “primer portavoz parlamentario en silla de ruedas” en la Cámara Baja, sus señorías “no han tenido la decencia de mandar un mensaje claro a la sociedad” sobre la participación de las personas con discapacidad, máxime cuando éstas se encuentran en “condiciones de discriminación”.

Una reivindicación que han interrumpido sus compañeros en la Diputación Permanente con golpes en la mesa, haciendo las veces de aplausos, para respaldar las quejas del hasta ahora portavoz parlamentario del Grupo Confederal. Con un contundente y reiterativo “menuda vergüenza”, Echenique ha puesto fin a su incursión en la vida política, no sin antes lanzar otras tantas reivindicaciones, con algo más de colmillo.

Podemos y Montero, capitales

En términos más próximos a la política pura y dura, el hasta ahora dirigente de Podemos no ha dejado pasar la oportunidad para reivindicar la aportación de su formación a la política durante estos años, especialmente durante la recientemente concluida legislatura. Aludiendo a medidas legislativas como la Eutanasia, la subida del salario mínimo, el despliegue del Ingreso Mínimo Vital, Vivienda o Bienestar Animal como articulados capitales con el sello del partido morado. También, en un plano más personal, se ha mostrado orgulloso de haber dicho “verdades” y “hacer ruido”, dado que esa es la única manera para que “se escuche a los de abajo”.

Tampoco ha desaprovechado el momento de atención para reivindicar y loar la figura de su compañera de partido y ministra de Igualdad, Irene Montero. Echenique ha ensalzado con orgullo a la dirigente del espacio morado, quien ha desplegado, a su juicio, “una nueva y valiente ola de derechos feministas”, apuntando directamente a la Ley Trans, la reforma del aborto y, por supuesto, el solo sí es sí. Sobre este último punto, sin embargo, ha lamentado que recibiera los ataques “furibundos” de la “derecha judicial y mediática”, además de ser “mutilada parcialmente” por el acuerdo entre el Partido Popular y el Partido Socialista para su reforma y corregir los “efectos indeseados”.

Echenique, al igual que Irene Montero, fueron dos de las líneas rojas que pusieron los partidos que cobija la marca Sumar. De hecho, el propio exportavoz parlamentario habló en su momento de “vetos indirectos”, cuando rompió su silencio para “no interferir en el proceso de negociación” entre la plataforma de Yolanda Díaz y Podemos. A través de una carta, Echenique explicaba el motivo por el cuál no iba en listas para el 23J, haciendo énfasis en las negativas “explícitas” a que la ministra de Igualdad se integrara en la formación fucsia.

En este sentido, Echenique recordó en aquel 12 de julio que desde el equipo de Sumar impidieron que fuera Podemos quien encabezase, “por ejemplo”, la lista en Zaragoza, que no era sino el único sitio por el que tenía sentido que el exportavoz pudiera concurrir. “Siempre he estado a disposición del proyecto colectivo porque la política no va de nombres propios, sino de millones de compatriotas cuyas vidas aspiramos a hacer un poco mejor. Por tanto, esta decisión ha venido impuesta exactamente”, zanjó.