La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ya ha marcado la estrategia del partido después del "pésimo" resultado cosechado en las elecciones catalanas. La líder de la formación liberal insiste en distanciarse "todo lo posible", no solamente del PP, sino también de Pablo Casado.

"No somos el PP y es lo que va a verse de aquí en adelante", aseguraba uno de los colaboradores más cercanos de Arrimadas a la Cadena Ser. De esta manera, el partido naranja defiende tener "grandes diferencias" con los populares.

Ponen como ejemplo de ello, la ley de eutanasia donde dicen, mientras ellos miran por el "autónomo y el pequeño empresario", el PP plantea un "capitalismo de amiguetes y grandes empresas". Arrimadas va más allá e insiste, incluso, en plantear medidas "más progresistas" que las del PSOE.

Con todo ello, aseguran desde la formación liberal, esperan recuperar los escaños perdidos tanto a nivel nacional como autonómico, donde los resultados han sido cada vez peores. La mejor prueba de ello es, precisamente, Cataluña, donde los naranjas han pasado de gobernar a tener únicamente 6 escaños.

En esta línea, otra cuestión en la que insisten los de Arrimadas es "estar más cerca de la gente" (ciudadanos, militantes y votantes) y no volver a presentar propuestas que "no han servido para nada".