Los niños volverán a poder acudir a las plazas de toros en Baleares, donde hasta ahora los menores de edad tenían restringido el acceso. En concreto, lo que pretende Vox y ante lo que ha sucumbido el PP -así aparece en el documento firmado entre las partes- es modificar la regulación de la corridas de toros y de protección de los animales, más detalladamente el artículo 12, que impide que los menores puedan acceder a los eventos de esta índole.

En el misma ámbito de actuación, el texto se refiere a la defensa de la caza “facilitando a los cazadores el control de plagas y garantizando los mismos derechos y obligaciones que los del resto de comunidades autónomas” o promete derogar la ley de memoria y reconocimiento democrático de Baleares, de manera que “se evitará la destrucción de monumentos y elementos históricos, procurando su correcto mantenimiento y su conocimiento dentro del contexto histórico”.

Eliminación del catalán, “violencia intrafamiliar” o ley Trans

Entre los puntos más destacados del texto -y los más polémicos- se encuentran la eliminación del catalán como requisito en la función pública, la derogación de la Ley Trans autonómica o un “plan de choque contra la inmigración ilegal y la ocupación”.

El gobierno balear modificará igualmente las normas “que suponen una imposición lingüística”, mientras se compromete a eliminar la Oficina de Defensa de los Derechos Lingüísticas y a suspender la actual aplicación de la Ley de Educación.

Asimismo, en el pacto también se “exige la derogación de la ley trans” y la “modificación de la ley autonómica”, para que las mujeres “estén y se sientan protegidas en espacios de intimidad como vestuarios o baños, así como en el ámbito del deporte”. En la misma línea, se comprometen a aprobar una ley de infancia, en la que se pretenden establecer medidas “ante el adoctrinamiento y manipulación de menores y la violencia en todos los ámbitos: familiar escolar, redes sociales…”.

Este es uno de los puntos más controvertidos, habida cuenta de que el líder de los ‘populares’, Alberto Núñez Feijóo, ha defendido en las últimas horas que hay ciertas líneas rojas que no está dispuesto a traspasar en un hipotético acuerdo nacional, como las que tienen que ver con la violencia machista y el Orgullos LGTBI, aunque ya ha cedido ante Vox en varias cuestiones relativas.

Además de estas acciones, el PP balear también se ha comprometido a defender “la cultura de la vida frente a la eutanasia” y a quitar también las subvenciones a quienes, según el partido de extrema derecha, operan con fines ideológicos.

En la línea de otro de los puntos fuertes discursivos de Vox, los de Santiago Abascal plantean "un plan de choque inmediato contra la inmigración ilegal, la ocupación y la creciente inseguridad". En él pretenden además contar con la "colaboración documental" de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado con el objetivo de  identificar a estas personas en situación irregular "con el objetivo de que se proceda a su repatriación conforme a la ley".

El ‘regreso’ de los toros, allá donde gobierna Vox

Vox ha dejado claro que los toros son uno de los puntos que va a pelear en aquellos territorios en los que ha pasado a formar parte del Gobierno. Empezando por la Comunidad Valenciana, donde la ultraderecha y Carlos Mazón han dado el visto bueno a que el vicepresidente de la región sea el torero Vicente Barrera, quien ocupa también la consellería de Cultura.

En Gijón, donde tras los resultados del pasado 28M formaron un tripartito Foro Asturias, PP y Vox, la extrema derecha quiere que en agosto vuelva a celebrarse la feria taurina de Begoña, coincidiendo con los festejos de la Semana Grande. La nueva decisión quiere sustituir la de la anterior alcaldesa, Ana González, de no ampliar la prórroga de la concesión a la feria taurina al tratarse de un actividad cada vez más cuestionada. De hecho, en 2021 ya no hubo corridos en la ciudad.

En otro orden de cosas, la plaza, de titularidad municipal, se encuentra clausurada tras detectarse problemas en el asentamiento de las gradas, aunque según las voces locales “sin riesgo” para la época estival.

Algo similar ocurre en Valladolid, donde el Consistorio está también capitaneado por PP y Vox. Las fiestas taurinas del municipio durante las fiestas de la Virgen de San Lorenzo de Valladolid volverán a contar con el respaldo y la “presencia” institucional del Ayuntamiento de la capital.  

En última instancia, Madrid es otro de los enclaves en los que también se nota la presencia de Vox. Concretamente, en Móstoles, donde el programa incluye la devolución de los toros a la ciudad