Era el día más esperado del parlamentarismo español de las últimas fechas. Desde que Alberto Núñez Feijóo fue elegido formalmente presidente del PP en el Congreso de Sevilla, por aclamación y sin que el ruido interno por la guerra Casado-Ayuso le pasase factura, todos los ojos estaban pendientes del desembarco del dirigente gallego en el Senado.

Han sido cerca de 20 minutos de altura, con dos oradores perfectamente preparados para una contienda dialéctica que ha arrancado este martes y no acabará hasta finales de 2023, cuando, de no producirse contratiempos ni adelantos electorales, la ciudadanía deberá decidir entre dos modelos contrapuestos: el continuismo de Sánchez o la novedad de Feijóo. Además, y salvo terremoto en el tablero político, los españoles también decidirán quién acompaña en el viaje al líder elegido: por un lado, la aritmética variable del presidente, con la izquierda y los nacionalismos; frente a ellos, la extrema derecha que ya ha entrado en el Gobierno de Castilla y León y se posiciona, nuevamente, como llave de la gobernabilidad popular en Andalucía.

“Señor Sánchez, yo no he venido aquí a insultarle. He venido aquí a hacerle oposición, algo a lo que me ayudan sus ministros. El primer día vengo a ofrecerle un plan económico sin siglas y con propuestas razonables, tal y como han dicho presidentes autonómicos de su propio partido", ha arrancado Alberto Núñez Feijóo en la primera sesión de control al Senado que ha enfrentado al presidente con el nuevo líder de la oposición. 

"Merece la pena hacer un plan anticrisis que funcione. Los hogares son más pobres que el mes pasado pese a que la recaudación es mucho mayor de lo que teníamos previsto. Devolvamos ese dinero a las rentas medias y bajas, bajemos el IVA al 5% en el gas, la electricidad y los carburantes. Señor Sánchez, usted está recaudando más que nadie gracias a los fondos europeos. ¿Por qué nos endeuda usted 1.400 millones de euros cada semana?”, se ha preguntado el líder de la oposición. “Pactemos, sin hacerle caso a las minorías cuando no tienen razón y sí a las mayorías cuando la tenemos. Una cosa es gobernar y otra es resistir. Por eso yo le pregunto: ¿podría dejar de estar a la altura de las minorías independentistas y estarlo para la mayoría de los españoles? ¿Se ve capaz?", ha sentenciado el popular en un primer turno de palabra que ha servido de preludio de un conjunto de cuatro rounds en los que Feijóo tendría, posteriormente, una nueva oportunidad de hincar el diente en el terreno económico al líder del Ejecutivo.

“Estorbar, estorbar y estorbar”

Finalizada la pregunta parlamentaria de Feijóo, adornada con un sinfín de datos y un plan económico sobre la mesa, ha llegado el turno del presidente. Con la calma habitual de sus intervenciones, además de la fina ironía que ha convertido a Sánchez en un rival muy temido en el terreno de las ideas, el socialista ha pedido “una oposición de Estado” real y que se pueda corroborar en el Boletín Oficial del Estado: “Bienvenido al Senado, señor Feijóo. Hemos venido trabajando en la conferencia de presidentes para responder al desafío y el resultado ha sido fructífero, por lo que me gustaría extenderlo ahora que se va a dedicar a la política nacional. Siempre lo hemos querido así, con la mayoría más holgada posible, no solo con los partidos sino con los agentes sociales”.

"También hemos llegado a acuerdos con otras fuerzas políticas, con todas salvo la ultraderecha y ustedes. Les pido que hagan una oposición de Estado y útil", ha proseguido. "Por ahora tenemos que basarnos en sus declaraciones y no en sus hechos. Y usted ha tenido declaraciones desconcertantes, como que el PP será útil cuando gane, ya que no entienden la oposición de misma forma cuando gobiernan y cuando no lo hacen. Nosotros aprobamos desde la oposición un pacto contra el terrorismo, por la violencia machista, que no intrafamiliar, y otros tantos que han sido buenos", ha añadido Sánchez.

"El Gobierno de España lo que ha hecho siempre es proteger a las familias. Ahora lo estamos haciendo con la respuesta a la guerra y dentro de muy poco fijando un tope a la electricidad. Hemos trabajado sin descanso mientras que ustedes solo han hecho que estorbar, estorbar y estorbar", ha sentenciado.

El ‘efecto Feijóo’ y las familias españolas

Cuestionado sobre su condición de partido de Estado, Alberto Núñez Feijóo ha decidido arrancar su segunda y última intervención defendiendo al PP y criticando que aquellos que no están a la altura son “los socios del presidente”: “Se parece usted a un conductor que va en dirección contraria. Este partido está aquí para ejercer, para cumplir y servir a la mayoría de los españoles. A insultos me gana usted siempre, ya que no lo diré que estorba. Lo que sí le digo es que he venido a ofrecerle una alternativa”.

"¿No le parece a usted que bajar el impuesto de la renta supone bajar el impuesto al 75% de los contribuyentes? ¿O que transferir 5.000 millones de euros directamente a las empresas supondría ejecutar más fondos? ¿O que una línea de abastecimiento de alimentos podría servirnos para resistir? Nos dijo que España resistiría mejor que otros los efectos de la guerra, igual que con los 20 céntimos de rebaja de la gasolina sería suficiente. Todos sus presagios se los ha comido la inflación", ha añadido Feijóo. 

Para terminar, y teniendo en cuenta que el calendario ha querido que este primer ‘cara a cara’ con Pedro Sánchez se haya producido en plena campaña electoral en Andalucía, con el debate celebrado este lunes aún en la lista de prioridades de los equipos de campaña, el líder de la oposición ha aprovechado para hablar del ‘efecto Feijóo’ que recogía un documento en poder de Yolanda Díaz que fue grabado por las cámaras en el pasado Consejo de Ministros: “Se lo digo con toda cordialidad: si las familias se empobrecen, no tenemos que aceptarlo. Veo que ustedes insultan en el Consejo de Ministros. También he visto en la carpeta de una vicepresidenta que están preocupados por las elecciones andaluzas y el ‘efecto Feijóo’. Olvídese de esto y preocúpese por las familias españolas", ha sentenciado el popular, ganándose la primera ovación de una bancada entregada a su candidato y que ha hecho audible el aplauso durante cerca de un minuto cargado de significación. Ánimos renovados en el PP daban paso a Sánchez, que ha tenido la oportunidad, por su condición de presidente, de cerrar el debate.

La política sencilla: o derechos o retrocesos

Más breve que su predecesor, Sánchez ha querido cerrar la intervención con dos ideas sobre la mesa: la renovación de los órganos constitucionales caducados, que ha pedido hasta en dos ocasiones al líder de la oposición, y la política de los derechos sociales frente al retroceso que plantea la extrema derecha.

"En el fondo, señor Feijóo, la política es muy sencilla: o precarizamos las relaciones laborales o dignificamos la estabilidad en los puestos de trabajo en el marco de la reforma laboral, o devaluamos los sueldos o tenemos el SMI a 1.000 euros, o revalorizamos las pensiones conforme al IPC o los condenamos al 0,25% de cuando ustedes gobernaban... es así de sencillo. O derechos sociales o retrocesos sociales. Ustedes, con la palabra y con los hechos, apuestan por lo segundo", ha sentenciado el presidente.