"El Gobierno adoptará cuantas medidas sean precisas para poner fin al bloqueo judicial y que se respete la Constitución. En momentos de incertidumbre, serenidad y firmeza". Estas han sido las últimas palabras del jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, en su declaración institucional tras conocer la decisión de un Tribunal Constitucional que tomó una decisión "sin precedentes", en connivencia con el Partido Popular. Precisamente, el presidente ha censurado a la formación conservadora por "incumplir con el mandato constitucional". 

Con aires de urgencia, Moncloa alertaba a los focos mediáticos que debían posarse sobre el palacio presidencial. El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ofrecería su visión de lo acontecido tras la decisión del Tribunal Constitucional, que paralizó con nocturnidad la votación en el Senado de las dos enmiendas aprobadas en el Congreso de los Diputados sobre la reforma del sistema de mayorías para renovar la corte de garantías.

Ante la “gravedad de los hechos”, el presidente del Gobierno ha cargado las tintas contra el Partido Popular y la “mayoría conservadora” del propio tribunal. Sánchez ha lanzado un recado hacia ambos, atribuyendo a los conservadores el bloqueo del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y ahora del Constitucional (TC). Pero ha dejado patente que el sistema democrático español dispone de contrapesos para facilitar la “representación del pueblo” con el debate y la legislación parlamentaria pertinente.

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Sánchez, como el grueso de los integrantes del bloque de la investidura, ha reiterado las exigencias al Partido Popular para cumplir con la Constitución y abandonar las “distintas excusas” que se han trasladado desde Génova para torpedear por “medios espurios” la renovación de los órganos constitucionales. “Se ha impedido la representación del pueblo. Es un hecho grave y sin precedentes no solo en España, sino en ningún país del espacio europeo", ha continuado el jefe del Ejecutivo.

Moncloa es consciente de la “indignación” que la maniobra del PP ha generado en los “demócratas” después de que se cercenara un derecho “tan básico” como el de la representación. Asimismo, entiende la “preocupación” que pueda desatar en la ciudadanía un “choque institucional” de un calibre tan inmenso.

No obstante, la democracia goza de armas suficientes para combatir el “bloqueo injustificable” del Partido Popular en connivencia con el Tribunal Constitucional. Por ello, Sánchez ha advertido a la “mayoría conservadora” de que el Gobierno adoptará “cuantas medidas sean precisas para poner fin al bloqueo” y que se respete la Carta Magna. “En momentos de incertidumbre, se precisa serenidad y firmeza”, ha zanjado el jefe del Ejecutivo.

"Serenidad y firmeza"

Consciente de la gravedad de la situación, y tratando de alejar del tablero las declaraciones incendiarias y alarmistas que llenan de dudas nuestro sistema democrático, el líder del Ejecutivo ha reclamado que las próximas medidas se estudien desde la "serenidad y la firmeza". Una petición con un destinatario claro: Unidas Podemos. El socio minoritario del Gobierno, desde este lunes, y ya antes de que la corte de garantías emitiese su dictamen final aprobando la cautelarísima presentada por el PP, reclamaba al partido mayoritario del Gobierno valentía para plantar cara a lo que entienden como un golpe blando a la democracia desoyendo las resoluciones que saliesen del pleno del Constitucional y prosiguiendo en la tramitación parlamentaria de las enmiendas que estaban siendo objeto de valoración judicial. 

En la misma línea que el propio Sánchez se ha expresado minutos después el portavoz socialista en el Congreso de los Diputados, Patxi López, quien, sin profundizar, ha insistido en la idea de que se adoptarán todas las medidas necesarias para garantizar la capacidad legislativa de las Cortes Generales y la renovación de los órganos constitucionales caducados: "Esta decisión nos parece especialmente grave y preocupante. Primero por el origen: esto viene por un PP que no cumple la Constitución desde hace 4 años, con un CGPJ secuestrado por el PP y por jueces conservadores. No hay caso más evidente de esto que se dice ser juez y parte. Hay jueces con el mandato caducado que deciden sobre su propia destitución". 

Sobre las negociaciones con los socios de Gobierno e investidura, que ya reclaman la creación de una mesa urgente para analizar lo sucedido y ofrecer soluciones rápidas, López ha vuelto a reclamar calma: "Acabo de hablar con Pablo Echenique para hacer esto con tranquilidad y serenidad. Tenemos que pensar cuál es la mejor situación para conseguir el objetivo", ha reconocido el portavoz parlamentario. "La derecha política, apoyada por la derecha judicial, se niega a aceptar que la soberanía nace de las urnas y no de sus privilegios", ha sentenciado.

En sintonía con Batet y Gil

El comunicado convocado con caracter de urgencia por el presidente del Gobierno se ha asemejado, en las formas y en el fondo, con los pronunciados al filo de la medianoche de este lunes por la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, y su homólogo en el Senado, Ander Gil. "Esta decisión se produce en un contexto de bloqueo de nuestras instituciones y de frustración del mandato constitucional, de renovación de las mismas, que entraña el peligro de una potencial deslegitimación del sistema democrático”, arrancó Batet, quien definió las noticias recién salidas del Tribunal Constitucional como "un hecho sin precedentes en la historia de nuestra jurisdicción constitucional”. 

Ander Gil, minutos más tarde, insistió en la misma idea: se acataría la decisión, como ha reconocido el propio Sánchez, aunque la oposición era frontal a que la corte de garantías impidiese el correcto funcionamiento del debate parlamentario y la capacidad legislativa. “Hoy es un día insólito para la democracia. La medida adoptada por el TC, sin haber escuchado en ningún caso a las Cortes Generales, supone un triste punto de inflexión en nuestra historia reciente”, arrancaba Gil. "En 44 años de democracia jamás se había despojado a las cortes generales de su facultad de legislar. Su inviolabilidad queda de este modo seriamente comprometida”, sentenciaba.