Rocío Monasterio, portavoz de Vox en la Asamblea de Madrid, ha salido en defensa del Gobierno, después de que este jueves la gran mayoría de dirigentes del Partido Popular, con Pablo Casado a la cabeza, atacaran al Ejecutivo central lidera por Pedro Sánchez, acusándoles de haber actuado tarde y de manipular la cifra de fallecidos por el coronavirus.

“Que alguien del Partido Popular salga a reprocharle la falta de anticipación a Sánchez es un insulto. Quizás se ha olvidado de que gobiernan en la Comunidad de Madrid con competencias de Sanidad para comprar material, limitar eventos multitudinarios, incluso confinar poblaciones”, escribía la dirigente de la formación ultraderechista en su cuenta oficial de Twitter. Un mensaje que acumula más de 5.600 me gustas, y miles de comentarios, la gran mayoría de ellos sin dar crédito a esta especie de defensa al Gobierno por parte de un peso pesado de Vox.

Como señalábamos anteriormente, el tuit de Monasterio llegaba después de que Pablo Casado acusara durante el debate sobre la prórroga del estado de derecho a Sánchez de querer impulsar unos Pactos de la Moncloa para tapar su gestión que, en su opinión, “todo el mundo juzga como insuficiente e incapaz”.

Asimismo, una vez más, el presidente del PP le recriminaba al jefe del Ejecutivo español que actuase tarde, cuando ya había 288 muertos en España, y le pedía que “no mienta más”, porque según añadía, “no puede hacer peor las cosas”.

La carta de Lastra que desmonta el discurso del PP

Unas palabras de Casado que tendrían réplica pocos minutos después por parte de la portavoz del PSOE en el Congreso, Adriana Lastra. La socialista acusaba a su vez al PP y a su líder de fomentar y propagar bulos. "Este error le perseguirá toda la vida", añadía la diputada desde la tribuna de oradores de la Cámara Baja. 

“Si ustedes, señor Casado y la señora Ayuso, tenían tan claro lo que podían pasar, ¿por qué no impidieron la falta de recursos de las comunidades que gobiernan y especialmente de Madrid?”, continuaba Lastra. Un reproche que la portavoz socialista apoyaba con una una carta fechada el pasado 5 de marzo y enviada por la Comunidad de Madrid donde se instaba a los empleados públicos a que “continuaran con su actividad con toda normalidad” ante la amenaza por el brote de coronavirus.