Después de la segunda recolocación en siete días de Ángeles Pedraza, tras dejar vacante el Comisionado de las Víctimas del Terrorismo, el PP esboza una nueva carambola en Madrid. En Génova quieren que María del Mar Blanco – diputada en el Congreso – deje su escaño para que ocupe el puesto que hace dos semanas era propiedad de la actual gerente del 112, según informa la Cadena SER, y que está premiado con un sueldo público de 75.084 euros al año.

De esta manera, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, la lista correría y entraría en el Congreso de los Diputados Carlos Aragonés, marido de la exconsejera de Esperanza Aguirre e imputada en Púnica, Lucía Figar. Una jugada que no es nueva en Génova 13. El encaje de bolillos es habitual.

De hecho, para que se hable a día de hoy de Marimar Blanco como diputada fue necesario que Daniel Lacalle renunciara a su escaño en el Hemiciclo. El economista fue uno de los fichajes estrella de Pablo Casado para las elecciones del pasado 28A. No obstante, su condición de galáctico no fue óbice para que se le sacrificara en pos de situar a Blanco, que se había quedado fuera tras el catastrófico resultado de los de Génova.

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El caso Pedraza

La expresidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) ha ocupado tres puestos en menos de 15 días. Todo un récord. Pedraza fue designada, hace dos semanas, como Comisionada de las Víctimas del Terrorismo en Madrid. Sin embargo, siete días después, los populares la cesaron de su cargo y la pusieron al frente de la Cañada Real Galiana.

En esta primera recolocación, Pedraza debía ejercer de interlocutora entre las diversas administraciones que coordinan los planes de intervención de los asentamientos de construcciones irregulares de Coslada, Rivas Vaciamadrid y la capital. Sin embargo, a la expresidenta de la AVT no le gustaba este nuevo puesto y acudió a la cúpula de Génova en busca de ayuda.

Como buen ejemplo de quien no llora, no mama, Pedraza consiguió lo que quería. Abandonar el Comisionado de la Cañada Real para, finalmente, recalar en la gerencia de la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112, y pasando de un sueldo de poco más de 75.000 a casi 100.000 euros.

Tres semanas de carambolas que podrían estar relacionadas – el cese de Pedraza al frente de Víctimas del Terrorismo – con esta nueva estrategia que planean para ubicar a Marimar Blanco en el citado Comisionado. Por tanto, corre el escalafón para que Aragonés, exdirector del Gabinete de Presidencia durante el Gobierno de Aznar y marido de la imputada Lucía Figar, regrese al Congreso cuatro años después.