A falta de menos de una semana para la cita electoral del 13 de febrero, el Partido Popular sigue empeñado en hacer campaña electoral con la política nacional, olvidándose de los verdaderos problemas de Castilla y León. En este sentido, este domingo el líder del PP, Pablo Casado, rizaba el rizo y, en vez de aparecer con animales de fondo, denunciaba un ataque contra “la remolacha” al mismo tiempo que acusaba a la izquierda de demonizar el azúcar.

Asimismo, en el mismo acto, protagonizado en Palencia, Casado volvía a denunciar al Gobierno de Pedro Sánchez y Unidas Podemos por “hacer trampas” y “retorcer la soberanía nacional” para sacar adelante en el Congreso la reforma laboral. Por su parte, Mañueco, cada vez más en la cuerda floja en las encuestas, se limitaba a reclamar un “mandato rotundo en las urnas”, advirtiendo de que “un Gobierno Frankenstein es siempre un Gobierno débil”.

Un nerviosismo del PP que confronta con la campaña electoral que está desplegando el PSOE, quienes definitivamente se han convencido de que pueden volver a vencer en las elecciones. Por ello, este domingo los socialistas decidían exhibir músculo y juntar a su candidato con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero.

Un pinchazo de Mañueco en los sondeos que quedaba más que patente en la encuesta flash hecha pública este lunes por el CIS, que revela que el PP obtendría entre 24 y 30 escaños pero no lograría sumar mayoría absoluta para poder gobernar ni con Vox, al que otorga entre 8 y 9 procuradores.

Datos del CIS que Ciudadanos, exsocios de Gobierno de Mañueco, no dejaban escapar para echar en cara al todavía presidente de la Junta, señalando que el PP ha hecho "un pan como unas tortas" adelantando esos comicios al próximo 13 de febrero, porque ni los 'populares' consiguen la mayoría absoluta, ni los 'naranjas' se quedan fuera del tablero político en esa comunidad. “A alguno ya se le debería estar cayendo la cara de vergüenza si tuviera dignidad”, ha lamentado el portavoz de la dirección de Cs, Daniel Pérez Calvo.

Por último, Vox apretaba al PP desde la derecha avisando a Mañueco de que un hipotético apoyo de los ultras no le saldrá gratis. Además, la extrema derecha optaba por sembrar dudas en el electorado de los populares, avisando de la posibilidad de que estos prefieran un acuerdo con el PSOE antes que con los de Abascal y compañía: “Tenemos que saber con quién quiere salir el PP, si con el PSOE o con nosotros”.

Con este contexto político y tras el análisis de los estudios publicados desde el lunes 31 de enero por Electomanía, NC Report, Hamalgama Métrica, Target Point, GESOP, Sociométrica, Ágora Integral, Celeste-Tel, GAD3, 40db, Sigma Dos, Data 10 y el CIS, y elaborar un promedio de todos los datos de aquellos partidos que conseguirán representación parlamentaria, llega la edición de Castilla y León de la madre de todas las encuestas.

Intención de voto

En cuanto a la intención de voto, el PP de Mañueco sería el más votado con un 33,7% de los votos. De esta manera, el grupo conservador conseguiría una importante victoria ya que en 2019 quedó en segundo lugar por detrás de un PSOE que rozó el 35% de los votos y en la actualidad no llegaría al 30% (28,7%).

También habría cambios significativos respecto a las últimas elecciones en cuanto a Vox y Cs. La ultraderechista conseguiría auparse hasta la tercera posición gracias al 13,9% de los votos y Cs bajaría hasta el quinto puesto en menos de tres años. De esta manera, los naranjas conseguirían el 5% de los votos y el Podemos de Pablo Fernández crecería hasta el 7,2%.

En este sentido, hay que destacar que como no en todas las encuestas analizadas salen datos de las diferentes formaciones regionalistas, este medio ha decidido coger únicamente los datos de los cinco principales partidos.

Escaños

En cuanto al reparto de escaños, el PP se haría con 32-33, quedándose bastante lejos de la mayoría absoluta (41). Para ello, el dirigente popular necesitaría de Vox (10-11). Por su parte, el PSOE conseguiría 27-28 representantes, mientras que Unidas Podemos se quedaría en 2-3. Por último, Ciudadanos conseguiría eludir la quema y se quedaría en 1-2 escaños.