El ‘palacete’ de los duques de Palma no deja de estar de actualidad. Después de conocerse que el Rey dio a su hija 1,2 millones de euros para la inversión en esta propiedad, este viernes se ha conocido que el inmueble ha sido puesto en venta por 9,8 millones de euros a través de una inmobiliaria de Barcelona, por cuyo anuncio han podido conocerse detalles de la propiedad de 1.000 metros cuadrados en el exclusivo barrio barcelonés de Pedralbes.



Sobre un terreno de 2.200 metros, la casa de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin cuenta con siete habitaciones, un salón de 120 metros cuadrados en la planta baja y otro de 120 metros cuadrados en la planta superior, 10 baños, ascensor, varias estancias dedicadas al servicio, una casa de invitados, un centro de seguridad y una piscina con agua salada, entre otros lujos.



Estos detalles están incluidos en el anuncio que hace de la vivienda la inmobiliaria Barcelona Rent, que encabeza con la siguiente descripción: “villa de lujo en la zona más prestigiosa de Barcelona, con una hermosa vista de la ciudad”. Según Vanitatis, la mirada de los duques está puesta sobre el floreciente mercado ruso. La vivienda también se oferta en régimen de alquiler, con una mensualidad de 25.000 euros mensuales.



En el centro de la polémica desde que saltó por los aires el entramado Nóos, el palacete se ha convertido en un dolor de cabeza para los duques de Palma, que deben hacer frente ahora a la nueva estancia de la familia en Ginebra, a donde ya se han desplazado la infanta y sus hijos.