Cuando uno piensa en la campaña electoral ve a los líderes de los principales partidos dirigiéndose a su público, a sus feligreses, a los simpatizantes o curiosos reunidos en un mitin de tarde de un pueblo vacío ondeando banderas y aplaudiendo acompasados. Piensa en horas de tren, avión y autobús. En jefes de campaña protegiendo a sus líderes de la prensa, a periodistas protegiéndose de los jefes de campaña. Sin embargo, hay mucho más. La preparación previa, los equipos, los relatos, los golpes de timón, las encuestas y la subrepticia práctica de tratar de jugar bordeando los límites y denunciar las malas prácticas del contrario.

Es en este último de los casos donde entra la Junta Electoral Central, órgano regulador de que los partidos respeten las reglas del juego y no se aprovechen de su posición de poder para tratar de influir en el votante desde espacios prohibidos. Uno de estos espacios es el Consejo de Ministros. Con el Ejecutivo ahora en manos de PSOE y UP, al menos hasta el próximo 23 de julio, las denuncias del PP ante este órgano regulador son constantes; no obstante, la última no le ha salido como esperaba. Pese a que los populares han vendido el fallo como un apercibimiento al ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, la realidad es que la JEC ha rechazado la denuncia del PP al no considerar punible que el ministro se refiriese al líder de la oposición y candidato a La Moncloa, Alberto Núñez Feijóo, como destructivo.

Estas palabras fueron pronunciadas en la habitual rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros del pasado martes 6 de marzo. Concretamente, Bolaños, haciendo alusión al espíritu derogador que ha prometido el líder del PP en todas sus entrevistas e intervenciones cuando ha sido preguntado por sus líneas programáticas, expresó lo siguiente: “El proyecto del sr. Feijóo es derogar, es destructivo, es hacer que nuestro país retroceda, derogando avances que hemos aprobado esta legislatura”.

Unas palabras que escocieron en Génova, que no dudó en poner a la JEC en conocimiento de esta retahíla de calificativos para definir a Feijóo utilizando el Consejo de Ministros como escaparate. En el PP entienden que estos términos son propios de la campaña electoral; y en La Moncloa no se hace campaña. No obstante, la JEC pone de manifiesto en su escrito de alegaciones presentado que "derogar", "destruir" y "retroceder" son sinónimos.

“Lo único que hizo el ministro, en contestación a la pregunta de un periodista sobre la voluntad del sr. Feijóo de derogar las principales leyes aprobadas por el Gobierno, fue reproducir lo ya dicho por propio el líder de la oposición”, sostienen fuentes de Moncloa. No obstante, reconocen desde el Gobierno, el escrito de la JEC sí que insiste en que es necesario alejar al máximo las manifestaciones de carácter electoral en actos institucionales.

No es la única resolución de la JEC

No es la única resolución de la JEC que se ha dado a conocer en las últimas horas. Las elecciones en Melilla, salpicadas por una investigación sobre el fraude electoral en la compra del voto por correo, se convirtieron durante la campaña al 28M en el arma arrojadiza perfecta de la derecha para poner en duda el recuento de votos español. Un precepto que desestabilizaba el sistema democrático español y por el que Coalición por Melilla (CPM) -uno de los partidos presuntamente implicados, junto al PP- había reclamado ante el órgano electoral la repetición de los comicios. 

No obstante, la JEC ha desestimado sus peticiones, trasladando a la Junta Electoral de Zona (JEZ) que "deberá realizar la proclamación de electos en la Ciudad de Melilla conforme al resultado del escrutinio general realizado por dicha Junta Electoral". 

El acuerdo de la JEC, contra el que no cabe recurso, sí que admite que "el acuerdo de la JEZ sobre proclamación de electos puede ser objeto del recurso contencioso-electoral previsto en los artículos 109 y siguientes de la Ley Orgánica de Régimen Electoral (LOREG)", lo que conllevará, de presentarlo CPM, retrasar la constitución de la Asamblea 20 días, concretamente del 17 de junio al 7 de julio.