Francisco Igea ha decidido dar el paso. Finalmente, el vicepresidente de Castilla y León y líder de la plataforma Ciudadanos Eres Tú, ha anunciado oficialmente que concurrirá a las primarias por la presidencia de la formación. El 7 de marzo acabará el proceso interno que ha llevado a la Gestora a dirigir a los naranjas, después de que el pasado 10 de noviembre sufrieran una severa debacle cayendo de los 57 escaños a los 10 y obligando a la formación a repensar su estrategia.

Lo ha hecho en el parque de El Retiro, en Madrid, rodeado de sus pesos pesados: la exdiputada Orlena de Miguel, el candidato a compromisario Daniel Álvarez Cabo y la candidata a secretaria general Marta Marbán. Pese a intentar hasta el último momento llegar a un acuerdo con su rival (“Arrimadas es una buena conductora, pero hay que darle un Ferrari”), finalmente la petición del oficialismo se ha cumplido, y la invitación a presentar una candidatura alternativa que defienda la enmienda a la totalidad defendida por la plataforma que él lidera se ha materializado. "Habrá candidatura con miembros de toda clase y condición. Marta Marbán será mi número dos. Arrimadas era una buena opción, pero para ser líder hay que ser también capaz de escuchar a la militancia y no condicionarles", ha explicado el candidato en declaraciones a la prensa minutos antes de que arrancara el acto que ha tenido lugar en el centro neurálgico de la capital. 

Tras un duro enfrentamiento frente a las cámaras, el dirigente naranja refrendó que no había voluntad de diálogo por parte del núcleo duro de Ciudadanos. "Arrimadas tiene la opción de desmentir lo que dijo. Espero que lo haga. Nadie ha pedido un puesto, y cuenta con mi autorización expresa para hacer públicos los mensajes que nos hemos cruzado. La deshonestidad es lo peor en política. Espero que publique los Whatsapps", ha sentenciado. Abanderando el mensaje del aperturismo, que dé peso a los afiliados y descentralice la gestión, Igea tratará de presentar batalla a la hija predilecta del líder caído.

Desde que Albert Rivera dimitiera, el partido catalán ha caminado sobre el alambre. El máximo responsable, y uno de los fundadores de la marca, ejercía un poder omnipresente, rodeándose de afines y sepultando bajo fuego amigo a aquellos que levantaron la voz para argumentar que el rumbo escogido se alejaba de los valores fundacionales de la formación. Son precisamente estos valores -aquello de “ni rojos ni azules”- los que Igea planea recuperar de cara a los comicios internos.

Primero será el turno de elegir a los compromisarios. Esta decisión ya se debería haber adoptado, pero el fallo en el sistema de Scytl -empresa externa encargada de velar por el buen funcionamiento de esta elección- acabó provocando que la votación se postergara a este fin de semana, armando de motivos a aquellos que desconfían de las primarias del partido, judicializadas en Murcia, Castilla y León, Cantabria y Madrid.

Sin saber con cuántos compromisarios afines a la causa contará, Francisco Igea se lanza al ruedo. Arrimadas, que le ha retado públicamente alegando que en ningún momento liderará la formación si el “sistema de baronías” se impone”, contará con la presencia de un contrincante. Dos modelos diferentes y más ruido en Ciudadanos. La favorita, sentenció a sus compañeros: “Si no ganan, que se aparten”. A la espera de conocer los resultados, los críticos se enfrentan al aparato. Llega la hora de medir fuerzas.