En lugar de ir para adelante, en Reíllo, una localidad de Cuenca de 137 habitantes, han decidido ir marcha atrás. Franco vuelve a tener su propia calle, la calle Generalísimo, gracias al Partido Popular, que gobierna en la localidad. El dictador recupera de esta manera la calle que perdió en 2008, cuando pasó a llamarse calle de José Mondéjar, maestro de escuela en el pueblo y alcalde de Reíllo de 1963 a 1972.

"Franco es historia de España, igual que Isabel I de Castilla"
El alcalde de la localidad, Pablo Campillo, señaló en declaraciones a EFE que no han considerado que un alcalde deba tener una calle en el pueblo con su nombre y que por eso han decidido cambiarlo "por el nombre que tenía antes".

"Yo soy nacido en los 80 y para mí eso es historia de España, al igual que hay otra calle que se llama Isabel I de Castilla", declaró Campillo, quién añadió que el nombre anterior era de un alcalde también franquista, José Martínez Mondéjar, que "haría cosas buenas y malas por el pueblo, y no creemos que un alcalde sea más que nadie o sea necesario ponerle su nombre a una calle". Aseguró además que en el pueblo "los vecinos no se han pronunciado ni a favor ni en contra".

Vulneración de la Ley de la Memoria Histórica
El grupo municipal socialista ha criticado en una nota de prensa que el cambio de nombre vulnera la Ley de Memoria Histórica y que responde a un interés "por mantener reminiscencias franquistas". Recuerda que en el pleno del 19 de enero de 2008, la Corporación decidió poner a esa calle el nombre de José Mondéjar porque "era una persona muy querida y reconocida en el pueblo". Durante su mandato, señalan, se construyó el alcantarillado de la localidad, la instalación de la red de agua, el firme en las calles, las zonas ajardinadas o una cooperativa.

La Asociación Ciudadanos por la República de Cuenca ha exigido a la Subdelegación del Gobierno que actúe y haga cumplir la Ley de Memoria Histórica.

Otras calles franquistas en España
Madrid es una de las muchas ciudades españolas que mantienen todavía vestigios franquistas en sus calles. En total, 165 nombres de calles de la capital están directamente relacionados con personajes de la dictadura.

Andalucía, por otro lado, se ha comprometido con la memoria histórica y ha decidido poner fin a todos los símbolos de la dictadura. El anteproyecto de Ley de Memoria Democrática de Andalucía que tramita el gobierno andaluz establece un plazo de 18 meses para la retirada de escudos, placas y nombres de calles que todavía exaltan el golpe de 1936 y el franquismo.