Felipe VI ha visitado este miércoles la ciudad de Ronda (Málaga) en la misma mañana en la que Juan Carlos I aterriza en Vigo para llegar a Sanxenxo. El actual Jefe de Estado se ha dejado ver en el municipio andaluz, donde participa de los actos conmemorativos del 450 aniversario de la Rea Maestranza de Caballería de la localidad.

El monarca ha viajado solo, sin la compañía de la reina Letizia, para presidir la reunión de las cinco Reales Maestranzas de Caballería que hay en España (las de Sevilla, Granada, Valencia y Zaragoza). La cita ha comenzado a las 12:00 horas, minutos antes de los que estaba prevista la llegada de su padre a tierras gallegas.

Después de ésta, Felipe VI llevará a cabo un recorrido por el exterior de la plaza de toros y asistirá a una exhibición ecuestre acompañado por varias personalidades políticas que acuden en representación de la zona, entre ellas el presidenta de Andalucía, Juanma Moreno Bonilla. El viaje pasa a ser la primera vez que el rey vigente visita la localidad malagueña, mientras que su padre lo hizo en varias ocasiones para asistir a actos de la propia Real Maestranza y la corrida Goyesca que se celebra en las fiestas rondeñas.

Tú a Ronda, yo a Sanxenxo

Entretanto, Juan Carlos I hace su aparición en el otro extremo -casi literalmente- del mapa. Y la hace en avión privado y cargado de secretismo; bastante más que el del mismo viaje en mayo de 2022. Aquí se rodeará de amigos y conocidos motivado por lo que le ha llevado a trasladarse al país en las últimas ocasiones: las regatas. De hecho, una de las personas fundamentales de su vuelta será otra vez su amigo Pedro Campos, presidente del Club Náutico y en cuya casa volverá a alojarse, al igual que hizo hace cosa de un año.

Fuentes de Casa Real no descartan que sea la primera visita de una larga lista que podría extenderse a finales de mayo y principios de junio y julio; fechas en las que coinciden las regatas de entrenamiento con las que el emérito estaría pensando ponerse a punto de cara al torneo del mundo de vela de agosto. En concreto, Juan Carlos I podría tener entre sus planes participar del torneo del mundo en la categoría de la clase 6 metros (6m).

¿Un flaco favor a la corona?

La vuelta de Juan Carlos I podría dañar la imagen de Casa Real, y es que la irrupción electoral del monarca ha sido a todas luces inesperada. En este sentido, la intención de Zarzuela pasaba porque el anterior Jefe de Estado no volviera hasta pasadas las elecciones del 28M para, precisamente, no interferir en las mismas. En esa línea, el emérito ha vuelto a ser motivo de debate dentro de las formaciones políticas, que mantienen las críticas los más contundentes (Unidas Podemos y partidos independentistas), la cautela el principal partido de Moncloa (PSOE) y las alabanzas los más conservadores.

De lo que no cabe duda es de que el rey Juan Carlos no es demasiado amigo de pasar desapercibido. No lo hizo en la anterior ocasión cuando se tomó a sorna la cuestión de un periodista que le preguntaba por las explicaciones, ni lo hace ahora, dejándose ver tras una cena a todo tren en uno de los lugares más selectos de Londres; el club Oswald, o asistiendo al palco de Satamford Bridge para presenciar el Chelsea-Real Madrid en Stamford Bridge. A partir de aquí, ElPlural.com pregunta a sus lectores: “¿Crees que la visita de Juan Carlos I a Sanxenxo perjudica a la imagen de la corona?"