De nuevo, la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ)volverá a estancarse a pesar del periodo de alto al fuego en las hostilidades entre PSOE y Partido Popular. El advenimiento de Alberto Núñez Feijóo a la cúspide de Génova atisbaba vientos de cambio. Sin embargo, las tiranteces han regresado entre las dos principales fuerzas. La reforma propuesta por el Gobierno para renovar el Tribunal Constitucional supone, a juicio del presidente de los conservadores, una voladura de los “puentes” para la negociación del CGPJ.

En estos términos se ha expresado el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, un día después de que el PSOE anunciara sus intenciones de cambiar de nuevo la ley para que el Poder Judicial escoja a los magistrados del Constitucional. Lo ha hecho en una entrevista concedida a El Programa de Ana Rosa, en Telecinco, donde ha señalado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como responsable de la voladura de los “puentes” entre ambas formaciones.

Los socialistas han registrado este viernes en el Congreso de los Diputados una proposición de ley que se tramitará por la vía de urgencia. De esta manera, el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), en funciones desde diciembre de 2018, pueda proponer dos magistrados para la renovación del Tribunal Constitucional.

Reforma “unilateral”

La jugada de los socialistas, arrastrados por el Partido Popular hacia un bucle infinito, se ha dado de bruces contra la fachada de Génova 13. Feijóo ha censurado que su formación se ha enterado por los medios de las intenciones de sus interlocutores, insinuando que el Ejecutivo se enmienda a sí mismo al “reponer” las competencias del CGPJ que le fueron arrebatadas meses atrás.

En este sentido, Feijóo ha indicado que el Gobierno “dejó sin competencias” al Poder Judicial y, como ahora “le interesa” modificar el Constitucional para cubrir las vacantes, “repone parte de las competencias hurtadas”. El líder del PP, que se ha referido a este movimiento como un intento de los socialistas por “controlar el TC, ha manifestado su “preocupación” después de lo que “hemos visto” con el CNI, la Fiscalía General del Estado o el CIS.

Feijóo ha atacado al Ejecutivo con dureza porque busca el “control” del Tribunal Constitucional, lo que supone la ruptura de “cualquier tipo de puente” con su formación para negociar la renovación del Poder Judicial. De hecho, desliza que el objetivo del Gobierno no pasa por “negociar con el PP”.

El PSOE se justifica

Por su parte, el portavoz parlamentario del PSOE, Héctor Gómez, en declaraciones a los medios congregados en la Carrera de San Jerónimo, no considera que esta proposición aleje aún más el pacto con los populares. En este sentido, ha expuesto que la posición de los socialistas pivota sobre la dotación de un escenario de “normalidad” al funcionamiento del Constitución.

Gómez, antes de apelar a la “responsabilidad” de las fuerzas parlamentarias, ha subrayado que no pueden “esperar sine die” a que el Partido Popular muestre su “voluntad” para que los tribunales funcionen correctamente.