España se sumará al procedimiento abierto contra Israel en el Tribunal Internacional de Justicia, convirtiéndose en el primer país europeo en hacerlo. "España va a intervenir en el procedimiento del Tribunal Internacional de Justicia iniciado por Sudáfrica ante la situación en Gaza. Se trata de un paso que llevamos valorando muchas semanas y que ya han dado otros países", ha trasladado el ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación y Unión Europea, José Manuel Albares, durante la convocatoria urgente celebrada en la sede del Ministerio.
"Presentamos una declaración de intervención en el procedimiento. Buscamos apoyar al Tribunal en la aplicación de las medidas cautelares, especialmente en la finalización de las operaciones militares en Rafah para que vuelva la paz, en los obstáculos a la entrada de ayuda humanitaria que deben terminar y en la destrucción de infraestructuras civiles que deben cesar", ha explicado cómo será la intervención de España en la demanda, que emularán Irlanda y Bélgica, que ya han anunciado su intención. En esta materia, los países de Latinoamérica llevan mucha ventaja.
¿Qué significa esta intervención?
La forma en que un Estado interviene en un caso ante este Tribunal es presentando una Memoria Interpretativa “con la pretensión de ayudar a la Justicia en su interpretación”, ha explicado el titular de la cartera de Exteriores. No obstante, ha querido dejar claro que “no es el Estado el que toma la decisión ni se posiciona con ninguna de las partes del proceso, sino que toma partido a favor del Tribunal para ayudarle lo que tenga ser su interpretación”.
La principal justificación esbozada por Albares es el incumplimiento reiterado y soberbio de las medidas cautelares establecidas por el Tribunal por parte de Israel. “Hemos visto los sucesos de todos estos días y noches, los bombardeos que están teniendo lugar, y están lejos de cumplirse estas medidas. Vemos como la ayuda humanitaria sigue sin poder acceder a la población civil”, ha recitado el ministro, llamando al “respeto del derecho internacional” y a la “búsqueda de la paz”.
Albares evita hablar de genocidio
El ministro de Exteriores ha sido contundente en su condena de los actos de Israel, pero ha evitado tildarlos de crímenes de guerra, genocidio, apartheid o cualquier otro término que describa la situación real y posiciones a España marcadamente. "Poco importa mi opinión personal, el ministro de Asuntos Exteriores no está para dar sus opiniones personales", ha trasladado, poniendo el foco en que "la opinión institucional del Gobierno de España hoy es la intervención en esta demanda".
El proceder es el mismo, aunque más tardía, que con la demanda formulada por Ucrania contra Rusia. "Esto no es un concurso o una carrera de a ver quién tiene una opinión más matizada o menos matizada", ha puntualizado. La decisión de si lo que está cometiendo Israel ante los ojos de todo el mundo es un genocidio, para Albares, “es una labor del Tribunal”. “Por supuesto, España, de igual manera que está haciendo con las medidas cautelares, apoyará, respetará y cumplirá la decisión que tome el Tribunal Internacional de Justicia e instará a las partes a hacer lo mismo”, ha desarrollado.
Sumar busca apuntarse el tanto y Podemos pide más
La líder de Sumar, Yolanda Díaz, ha celebrado que España se vaya a sumar a la demanda presentada por Sudáfrica contra Israel por presunta violación de la Convención contra el Genocidio por su ofensiva militar en Gaza, medida que su formación llevaba tiempo demandando. Al respecto, ha buscado anotarse el tanto. “Lo hemos conseguido. España también se sumará a la demanda de Sudáfrica para perseguir los crímenes de guerra de Israel”, ha compartido en sus redes sociales asegurando que “seguimos estando en el lado correcto” y utilizando la palabra tabú para Albares.
“Dando pasos para parar el genocidio e inspirar a que cada vez más países sigan este camino”, ha zanjado la vicepresidenta y ministra de Trabajo. Por parte de los magentas, Pablo Bustinduy ha exigido más. “No es suficiente. Debemos adoptar medidas de presión económica y comercial para poner fin al genocidio y el régimen de apartheid en Palestina”, ha apuntado el ministro de Consumo. La alegría ha sido aún menor en Podemos, formación a la que ha molestado el no posicionamiento del ministro.
“Qué forma de estropear un buen gesto, fruto de la movilización y el esfuerzo de todo un pueblo, el de nuestro país, que quiere paz y el fin del genocidio”, ha valorado la secretaria general de los morados, Ione Belarra. En la misma línea, la candidata a las europeas, Irene Montero, ha exigido la “ruptura de relaciones y el embargo de armas”. “A tres días de las elecciones entramos en el procedimiento pero no para ir contra el Estado genocida de Israel”, ha lamentado, preguntándose entonces “para qué” vale este paso. “Basta”, ha zanjado, pidiendo ir más allá en la condena y las consecuencias contra el genocidio israelí.
