Albert Rivera presentaba Un ciudadano libre en Zaragoza en la tarde del jueves, prácticamente mientras en el Congreso se votaban las enmiendas a la totalidad de los Presupuestos Generales del Estado. En el acto, el expresidente deslizó que si tuviera que aguantar todo esto tendría que ir “escoltado” ante sus votantes. El entorno de Inés Arrimadas entiende que estas declaraciones no fueron casuales y hablan de una “campaña interna” contra la presidenta naranja.

“Veo todo lo que pasa y… ¡ay por Dios! Menos mal que dimití, porque si tengo que aguantar todo esto es que tengo que ir escoltado pero frente a mis votantes, porque como les había dicho que no iba a hacer todo eso…”. Con estos términos se refirió Albert Rivera, indirectamente, sobre Inés Arrimadas.

Sin embargo, tras el estallido de la polémica, el que fuera presidente de Ciudadanos quiso matizar sus declaraciones y justificó que no valoraba la situación actual del partido. Una versión que ha aceptado la propia Inés Arrimadas en declaraciones a la Cadena SER, quien, a su vez, ha rehusado entrar en el cuerpo a cuerpo con su predecesor.

Menos mal que dimití, porque si tengo que aguantar todo esto es que tengo que ir escoltado pero frente a mis votantes

En su cuenta de Twitter, Albert Rivera aseveró que su análisis nada tenía que ver con el rumbo elegido por Inés Arrimadas: "Nunca he pronunciado públicamente, hoy tampoco, ni una palabra sobre las decisiones que toma la actual cúpula de Cs". Tachó de "falso", entre otros, el titular de este periódico.

Una “campaña interna”

Inés Arrimadas y la cúpula de Ciudadanos empiezan a estar “cansadas” de la “campaña interna” que se está produciendo contra la dirigente del partido. Según cuenta la Cadena SER, fuentes de la directiva naranja aseguran que las declaraciones de Albert Rivera “no fueron casuales” y sostienen que “sabía perfectamente lo que estaba haciendo” aunque luego “diera marcha atrás”.

Dijo la verdad de lo que piensa y, cuando se dio cuenta de la que se había liado, corrió a desmentirlo

Estas mismas fuentes aseguran que las decisiones que se están tomando están aprobadas por el congreso del partido en mayo. El entorno de Inés Arrimadas entiende que el objetivo ahora es “proteger” a la presidenta del partido y “demostrar que las bases están con ella”.

“Como se desmintiera a sí mismo”

Por su parte, El Español recoge el testimonio de hasta tres dirigentes estrechamente vinculados con Albert Rivera y sorprendidos por las declaraciones del expresidente de la formación liberal. “Está claro que se refería a lo que hace Ciudadanos ahora. Su mensaje es muy raro, como si desmintiera a sí mismo”, explican.

Sin embargo, el mensaje que mandan ante los focos es que Rivera “tiene muy buena relación con la actual dirección” y que ya ha aclarado que “no busca hacer daño”. Un mensaje que ha sido amplificado con la voz de Inés Arrimadas ante los micrófonos de la Cadena SER esta misma mañana. “No se refería a nosotros”, señalaba.

Sin embargo, internamente entienden que “no pudo contenerse” y que dio una “respuesta improvisada en la parte final de la intervención”. “Dijo la verdad de lo que piensa y, cuando se dio cuenta de la que se había liado, corrió a desmentirlo”, explican desde el partido naranja. Además, matizan que “Inés y él representan modelos muy distintos”.