El Congreso de los Diputados ha tumbado las enmiendas a la totalidad a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) del Gobierno de España. La Cámara Baja ha rechazado las enmiendas de los grupos parlamentarios Popular, Vox, JxCat (G.P. Plural), BNG (Grupo Plural), CUP (G.P. Mixto), Coalición Canaria (G.P. Mixto) y Foro Asturias (G.P. Mixto). Las cuentas continuarán su tramitación y no serán aprobadas hasta finales de mes, quedando sin resolver la incógnita de si Ciudadanos finalmente casa en una mesa junto a Unidas Podemos y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC).

La ministra de Hacienda y encargada de defender los PGE del Ejecutivo de Pedro Sánchez, María Jesús Montero, ha tendido la mano a los naranjas y ha insistido en que todas las formaciones deberían participar de la elaboración de las cuentas dada la sensible situación. De hecho, ha calificado de irresponsables a los que se han enfrascado en el ‘no’: “Si no es ahora cuando un país tiene que tener altura de miras y superar una suerte de veto cruzado. Creo que es un momento tan extraordinario de país que anteponer antes el qué al con quién, me parece difícil de explicar”.

El portavoz de Esquerra, Gabriel Rufián, ha utilizado buena parte de su intervención para reivindicar la utilidad de su partido frente al aislacionismo de JxCat y sus continuos ataques: “Quien diga que esto es una traición al pueblo catalán es porque lleva mucho tiempo usando chaquetas de 1.000 euros o paseando con bolsos de Michael Kors”.

Rufián ha argumentado que su formación mide el “patriotismo” en “metros de hospitales, escuelas e inversiones” y no en “metros de tela”. Sin embargo, ha alegado que estos Presupuestos no son, ni mucho menos, “las tablas de Moisés”, pues mantienen una “terrible y abusiva” financiación a una institución “tan corrupta y antidemocrática” como la Casa Real.

“No negociar es una terrible irresponsabilidad”, ha concluido; un mensaje que ha sido aplaudido por Montero por permitir la tramitación de los Presupuestos. Sin embargo, la ministra le ha afeado que dirigiera parte de su discurso a Arrimadas: “No hay que ser muy espabilado para haberse dado cuenta de este matiz y le quiero decir que, si no es ahora cuando un país tiene que tener altura de miras y superar una suerte de veto cruzado…”.

Arrimadas negociará sus "líneas naranjas"

Pese a que ERC dice que es inviable pactar unos Presupuestos que aúnen ambas almas y a los ataques de los morados, Arrimadas ha aceptado sentarse a negociar. La diputada y portavoz de Ciudadanos así lo ha confirmado, alegando responsabilidad, imponiendo lo que ha denominado “líneas naranjas”.

“La angustia sanitaria y económica no ven reflejada esa angustia en el Congreso. No les culpo, les entiendo y pido disculpas. Hemos sido muy conscientes de que esto no podía ser una burbuja para los Ciudadanos y por eso tendimos la mano al Gobierno para aprobar unos Presupuestos de emergencia nacional porque sabíamos que sería devastador”, ha argumentado la líder de Ciudadanos durante el debate a la totalidad de los Presupuestos.

Arrimadas ha lamentado que “no todos los partidos están actuando de la misma manera”, haciendo referencia a Partido Popular y Vox, enfrascados en el ‘no’ continuo. A su juicio, su postura es irresponsable porque “hay que hablar con el Gobierno para que los españoles vieran que sentándose se pueden conseguir cosas”.

Los ataques de Echenique

Durante su turno, el diputado y portavoz parlamentario de Unidas Podemos, Pablo Echenique, se ha dedicado a acorralar a la formación naranja negando que hayan arrancado ningún compromiso al Ejecutivo y lamentando que maniobre para volver a la “foto de Colón”.

“Trabajamos discretamente, trasladando al Gobierno líneas naranjas. Lástima que no esté el señor Echenique. Ha dedicado la mitad de su discurso a hablar de Ciudadanos. Pues para no conseguir nada, que hable de Ciudadanos durante la mitad de su discurso…”, ha ironizado Arrimadas.

La dirigente naranja ha admitido que “no son los Presupuestos que nos gustan, pero prefiero negociar que cerrarme en banda”.

Eso sí, ha matizado que “esto no significa que suponga votar favorablemente a los Presupuestos. Simplemente dejamos que se tramiten. Para votar favorablemente se necesitan más lineas naranjas”. Y una de esas condiciones, ha precisado, será “no ceder a los chantajes del separatismo”.