La herida no se ha cerrado a pesar de que en público los entornos de Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso lanzan la pelota fuera. Las luchas intestinas en el PP han laminado a la formación en la demoscopia. El partido va cuesta abajo y sin frenos, entregando la voz cantante a un PSOE que ha dado alas. Los enfrentamientos entre las dos ‘familias’ populares han llegado a la CEOE, donde se respira preocupación al observar a un partido que ha rehusado “plantar cara a un Sánchez francamente débil”.

El “malestar” crece por momentos entre la clase empresarial del país. Según El Independiente, el mensaje entre los integrantes de la patronal es prácticamente unánime. Creen que el PP está “perdiendo una oportunidad” única de hacer frente a un PSOE, cuyo líder está debilitado y con una tendencia bajista en las encuestas “por una distracción inútil”.

En las entrañas de la CEOE son incapaces de explicarse el porqué de una guerra fratricida que lo único que aporta es inestabilidad en la consolidación de una alternativa en la que Casado lleva trabajando desde 2018. Según recoge el citado medio, las conversaciones en círculos empresariales se han avivado. Tanto es así que reseñables agentes económicos han trasladado una serie de “toques de atención” a Génova, incluyendo a vacas sagradas del Ibex.

“Casado está perdiendo una muy buena oportunidad para plantar cara a un Sánchez francamente débil y cuesta abajo en las encuestas por una distracción inútil”, argumentan. La CEOE ha trasladado al Partido Popular su “desconcierto” en torno a una crisis cuya solución entienden “sencilla” y pasa por “salir de la mano de Ayuso” y proclamar que es “la mejor presidenta para el PP de Madrid y que juntos hay que echar a Sánchez”.

La diagnosis de los empresarios converge con la de algunos dirigentes del Partido Popular, que exigen a Pablo Casado que ataje cuanto antes la situación. A su entender, ha de hallar el método para pacificar “ya” y sofocar el fuego porque la crisis, al menos por el momento, está dañando más a Génova “exclusivamente” que al equipo de la presidenta de la Comunidad de Madrid.

“Es una distracción innecesaria. Es lógico que el PP será más fuerte si tiene a Isabel Díaz Ayuso como aliada. No se puede perder el tiempo en estas cosas”, explica un reseñable actor económico que tiene un vínculo especial con los conservadores. Pero la paciencia tiene un límite y la de los empresarios está en la reserva. La gestión de Pedro Sánchez ya genera “malestar” en los círculos empresariales. La “deriva absurda” de la política económica de la coalición ha abocado a éstos a fiar su futuro al principal partido de la oposición.