Esteban González Pons está desaparecido. Ya no le dejan dar ruedas de prensa en la sede nacional del PP, en la calle Génova, ahora cuando no las da Cospedal las da Carlos Floriano. Tampoco se prodiga en entrevistas. El que fuera flamante portavoz del PP, que iba a rueda de prensa diaria, con soflamas incendiarias contra el PSOE, ni consiguió entrar en el Gobierno ni parecer conseguir consolidar poder interno en el PP. Si se mantiene activo en twitter, pero con cuestiones poco políticas, la última cuando informó a través de la red social de la aparición de una culebra en el balcón de la habitaicón de sus hijos. Colgó una foto con el reptil en twitter y le cayeron chuzos de punta con bromas e ironías. Triunfó el apelativo que le pusieron "Indiana Pons".

Más pruebas que le implican
El exsocio de Iñaki Urdagarín, Diego Torres, ha entregado al juez que instruye el caso Nóos varios correos electrónicos en los que se detallan reuniones con Esteban González Pons, con motivos de los fallidos "Juegos Europeos" que el yerno del rey propuso organizar a la Generalitat valenciana.

En uno de los correos uno de los empleados del Instituto Nóos detalla que González Pons y el expresidente de la Generalitat valenciana, Víctor Campos, tenían planteamientos "algo distintos" sobre la organización de dichos juegos.

Reunión con Urdangarín
El 7 de junio de 2.006 Iñaki Urdangarín y su exsocio, Diego Torres, se reunieron con Víctor Campos en un restaurante y por la tarde se reunieron con González Pons, consejero de Presidencia de la Generalitat por aquel entonces y que fue quien firmó el contrato con Nóos para realizar los "Juegos Europeos".

La Generalitat valenciana llegó a reservar 6 millones de euros para la celebración de esos juegos, concebidos como una especie de Olimpiadas del Mediterráneo. De esos 6 millones la Generalitat desembolsó 382.000 euros a la sociedad Nóos.