Tras la intervención de Pedro Sánchez con la reivindicación prácticamente como colofón del 8 de marzo, Pablo Casado subía al atril para lanzar un discurso en el que ha abordado los mantras de ETA y Venezuela. El líder de la oposición ha criticado el “sectarismo” del Ejecutivo y ha asegurado que “es el presidente más radical de la historia”.

En la segunda votación (del estado de alarma) nos sorprendieron con una salva de insultos cuando les estábamos apoyando”, recuerda Pablo Casado, quien también ha reprochado los “ataques a nuestros presidentes autonómicos”.

“Aún esperamos su respuesta sobre nuestra mano tendida para un Pacto de Estado sobre la Sanidad, pero sigue siendo el del ‘no es no’ y el que decía que con el PP no se puede pactar nada”, recuerda el dirigente de los conservadores. Asimismo, ha señalado que “se ha cambiado de chaqueta en los dos últimos años, pero no puede ocultar que es el presidente más radical de la historia de España”.

Ataques con el Covid-19

Tras citar los 43.000 muertos por coronavirus que según el Instituto Carlos III ha habido en España, frente a los aproximadamente 27.000 que da el ministerio de Sanidad, Casado le ha preguntado: "¿le parece decente ocultar a los muertos para esconder su incompetencia?".

En el debate en el Congreso sobre una nueva prórroga del estado de alarma, el dirigente 'popular' ha afirmado que el Gobierno lleva adelante "pactos inconfesables" para seguir adelante con la alarma, con acuerdos como el alcanzado con Bildu, y de haber cruzado "demasiadas líneas rojas" hasta convertirse, ha dicho, "en el Gobierno menos democrático de nuestra democracia".