Partido Popular, Vox y Ciudadanos coparon las calles de Madrid en sus automóviles para protestar contra la nueva ley de Educación, conocida como Ley Celaá. Un día después de esta movilización, Pablo Casado ha visitado los estudios centrales de la Cadena COPE para lanzar un aviso al Ejecutivo. “Derogaremos este texto en cuanto lleguemos al Gobierno”, ha advertido.

Casado ha confesado que la movilización sirvió para reivindicar la “libertad de las familias a elegir el colegio que queremos para nuestros hijos”, para mantener viva a la “educación especial” y a la escuela concertada y para que “los españoles sigan siendo educados en español”. “Si no es mucho pedir”, ha apostillado el líder conservador.

El jefe de la oposición se ha mostrado muy crítico con esta ley y ya ha avanzado que “durará lo que dure el Gobierno” porque, en cuanto el Partido Popular llegue a La Moncloa, “la derogaremos”. Una advertencia que adereza los amagos de las autonomías gobernadas por los conservadores con la toma de medidas para frenar los efectos del texto.

La Ley Celaá durará lo que dure este Gobierno. La derogaremos en cuanto lleguemos al poder

Casado entiende que la Ley Celaá “socava la libertad de elección de las familias” y ha celebrado la existencia de un modelo autonómico “para que, cuando haya un Gobierno malo para los españoles, existan comunidades gobernadas por otros partidos que puedan revertir el efecto”.

Negociaciones y Bildu

El partido de Arnaldo Otegi amaga con ser la estrella principal de este mes de noviembre debido a los acercamientos del Gobierno para dar viabilidad a los Presupuestos Generales del Estado con la “mayoría de la investidura”. Ante esto, Pablo Casado ha deslizado ante Carlos Herrera que “hemos tendido la mano para que Sánchez” escogiera a otros “socios”, aunque no ha sido así. Por este motivo, ha censurado la ausencia de “moral” del presidente del Gobierno y le reprocha que “el fin no justifica los socios”.

Para mí, los escaños de una formación que no condena 800 asesinatos no son los mismos que los de PP o Cs

Le ha pedido explicaciones al jefe del Ejecutivo para que aclare por qué “ahora Bildu es una gran noticia para la democracia”, en alusiones a las promesas de Sánchez. “Para mí, los escaños de una formación que no condena 800 asesinatos no son los mismos que los de PP o Ciudadanos”, ha agregado.

A tenor de Bildu, se le ha interpelado a Casado por las declaraciones del ministro de Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, en las que desliza que los abertzales tienen más responsabilidad que el Partido Popular. “Me sentó igual que a Alfonso Guerra, Felipe González y tres o cuatro barones del PSOE”, ha apuntado.

El dirigente del Partido Popular ha recordado las “27 víctimas del terrorismo” que fueron asesinadas “por el mero hecho de ser del PP” y otras tantas del PSOE, aludiendo al vigésimo aniversario del asesinato de Ernest Lluch. “No vamos a admitir esa ofensa de que son más responsables que el PP”, ha zanjado.

La reagrupación del centro derecha

Casado ha recordado que ya ofreció una alianza del centro derecha – o “del constitucionalismo” – con España Suma y que fue rechazada tanto por Vox como por Ciudadanos. “Estamos en la etapa de unir a los votantes de estos partidos y hacer un frente común ante Pedro Sánchez”, ha deslizado el jefe de la oposición, quien también ha apelado al socialdemócrata “desencantado”.

Si Sánchez cumple con lo que dicta Bruselas y la Constitución, nuestra obligación será renovar el CGPJ

Sin acuerdo para el CGPJ

El líder conservador ha negado la proximidad de un acuerdo entre PP y PSOE para la renovación del CGPJ. “No está cerrado en absoluto”, ha declarado con contundencia Pablo Casado, quien ha insistido en que ésta ha de perpetrarse sin la presencia de Podemos porque es “un partido imputado y que critica al Rey”.

“No aceptaron nuestras condiciones y la pelota sigue estando en su tejado. Si cumple con lo que dicta Bruselas y la Constitución y retira la proposición de ley, nuestra obligación será renovarlo”, ha admitido Pablo Casado. Asimismo, ha advertido de que si Pedro Sánchez “no rectifica”, irá “hasta el final” en la Comisión de Venecia.