El Jueves, una revista satírica e histórica en los quioscos españoles. Una publicación en tono humorístico que, desde junio, ha encontrado su contestación desde la derecha e incluso más allá. La Gallina Ilustrada es la respuesta del flanco diestro a la “izquierda”. Tanto es así que hasta Santiago Abascal se la lleva al Congreso de los Diputados.

Esta revista nació en el año 2007 como suplemento de la publicación Chesterton. Sin embargo, el pasado mes de junio, dio el salto al papel con 24 páginas y algunas firmas que están muy cercanas a Vox. El precio de esta publicación quincenal – cada dos viernes – es de dos euros, aunque si prefiere una suscripción – en oferta de lanzamiento – podrá adquirir los 24 números por 39,99.

Al ver a Santiago Abascal con La Gallina Ilustrada bajo en su llegada al Hemiciclo, quedaba la duda de saber cómo es esta respuesta a El Jueves. Se definen como una publicación dispuesta a luchar contra “el monopolio de la izquierda en cultura, comunicación, cine y humor político”. Es decir, una contestación para “dar batalla cultural desde el humor inteligente”.

Este humor inteligente crítico con el PP y cercano a Vox, se entremezcla con firmas próximas a la formación ultraderechista, como Fernando Paz. Este colaborador fue el mismo que renunció a su candidatura por Vox por Albacete después de que trascendieran infinidad de comentarios homófobos e incluso negacionistas con el Holocausto.

A Fernando Paz se le unen Kiko Méndez Monasterio, asesor de Abascal y Rafael Baldají. Este último, crítico con el PP que, a la postre, abandonó para subirse al barco de Vox, el principal protegido de esta Gallina ilustrada que se mofa de la “tumba del tío abuelo desconocido” de Pablo Iglesias, entre otras lindezas.

Captura de La Gallina Ilustrada