El líder de Vox, Santiago Abascal, ha vuelto a convocar a sus seguidores a la plaza de Colón de Madrid para protestar contra la amnistía que el Gobierno de Pedro Sánchez negocia con los partidos independentistas catalanes. Sin embargo, la respuesta ciudadana ha sido muy inferior a la esperada por el partido de extrema derecha, que ha visto cómo su capacidad de movilización se ha reducido drásticamente en los últimos meses.

Pese a que según los datos facilitados por la formación ultraderechista han sido 100.000 personas las que han acudido a la manifestación organizada por la Fundación para la Defensa de la Nación Española (Denaes), afín a Vox y que fue presidida por Abascal hasta 2014, en las imágenes reales se puede observar cómo la asistencia ha sido infinitamente menor. Asimismo, la cifra contrasta con las 250.000 que, según la misma fuente, se congregaron en el mismo lugar en febrero de 2019 para exigir elecciones anticipadas al Ejecutivo socialista.

Las imágenes y los vídeos difundidos por las redes sociales muestran el escaso lleno de la plaza y las calles adyacentes, donde se podían ver amplios espacios vacíos y poca densidad de público. Algunos usuarios han comparado las fotografías de este domingo con las de otras convocatorias anteriores para evidenciar el fracaso de Vox.

Además, la manifestación ha contado con escasa representación de otros partidos políticos, pese a que Denaes había invitado a todos los líderes. Solo han asistido algunos exdirigentes del PP y de Ciudadanos críticos con sus actuales cúpulas, como Esperanza Aguirre, Jaime Mayor Oreja, Marcos de Quinto o Fernando Savater. Ninguno de ellos ha intervenido en el acto, que ha estado protagonizado por Abascal y por el presidente de Pie en Pared, Juan Carlos Girauta.

En su discurso, Abascal ha arremetido contra Sánchez, al que ha acusado de ser un "autócrata sin escrúpulos" que "pretende amnistiar a otros políticos para mantenerse en el poder". El líder de Vox ha advertido al presidente del Gobierno de que "responderá ante los españoles" si se atreve a "liquidar las leyes que permiten la convivencia" y le ha lanzado una amenaza velada: "Es mejor que en el próximo encuentro con Puigdemont le digas que te vaya preparando la habitación de invitados de Waterloo".

Abascal ha apelado a la "unidad y el patriotismo" de los asistentes y les ha pedido que sigan movilizados "por todos los medios legítimos" contra el "golpe" que, según él, se está perpetrando desde la Moncloa. El líder de Vox ha cerrado su intervención con un "¡Viva España!" y el himno nacional, mientras los manifestantes coreaban "presidente, presidente".

En calidad de convocante, el presidente de DENAES, Iván Vélez, ha trasladado a la multitud que una amnistía "sería asumir que los golpistas tenían razón, que España es una nación tiránica que utiliza a las instituciones para violentar a sus ciudadanos". Según ha indicado, "es realmente sorprendente que un Gobierno que está obsesionado con la memoria", en alusión a la Memoria Histórica, "pretenda que nos olvidemos del golpe de Estado que se perpetró en 2017".

Además, ha advertido de que, tras la amnistía, vendrá "alguna extraña maniobra" que permita un referéndum de autodeterminación en Catalunya. "Ya han dicho que lo volverán a hacer y nosotros volveremos a responder", ha avisado. En esta línea, ha asegurado que la secesión es "un robo de una parte de la nación", algo que "no se puede tolerar". "Todos somos responsables, hay que hacer lo posible para evitar este atropello y se balcanice" España.

Además, han intervenido otros cinco representantes de convocantes y asociaciones integradas en la convocatoria. Destacan la vicepresidenta de la asociación S'ha Acabat!, Andrea Llopart, que ha calificado la situación actual de España de "extrema gravedad". "La amnistía no será lo último, por eso necesitamos una posición firme y fuerte", ha urgido.

DENAES convocó la manifestación a principios de octubre, aduciendo la necesidad de "responder desde la calle y la sociedad civil" a "las oscuras maniobras" del presidente en funciones, en alusión a la negociación de una posible amnistía al "golpismo" catalán a cambio del apoyo de Junts en su investidura.

La manifestación de Vox se produce un día después de que Sánchez defendiera ante el Comité Federal del PSOE su intención de aprobar la amnistía "en nombre de España y de la convivencia". El presidente del Gobierno ha asegurado que se trata de una medida "necesaria" para superar el conflicto catalán y ha pedido "altura de miras" y "generosidad" a su partido y al resto de fuerzas políticas.