El balance económico del 2024 ha hallado algunos números poco favorables para el Gobierno autonómico de Valencia. Tal y como han reprochado los socialistas de esta comunidad autónoma, el primer año completo del Ejecutivo al frente de esta región ha abierto un agujero económico derivado de la mala gestión de un total de 860.000 facturas. Concretamente, son hasta 140 millones de euros los que deberá abonar la Generalitat en intereses e indemnizaciones por los retrasos acometidos en los pagos.
No solo eso, sino que desde el PSPV-PSOE han denunciado una gestión económica de la que, tal y como declaran, se han gastado "2.200 millones sin contrato ni control". Unas circunstancias por las cuales los socialistas recriminan “el rosario de irregularidades, pufos y mala gestión del Consell del PP-Vox, el más nocivo de la historia para los valencianos, destapado por la auditoría de la Sindicatura”. En este sentido, el portavoz adjunto en las Corts de esta formación, Toni Gaspar, ha señalado que las cifras puestas sobre la mesa evidencian que el primer año completo del Ejecutivo autonómico ha obtenido un balance negativo en el que "todos los indicadores han ido a peor, con el agravante de la opacidad y falta de transparencia en las decisiones”.
Por ello, Gaspar ha cargado contra el Consell valenciano, recordando que “los que venían a dar lecciones a un Consell honrado y responsable como el de Ximo Puig se han revelado como un atajo de incompetentes y frívolos: no solo era Mazón, todos acreditan su irresponsabilidad en la auditoría del Síndic”.
Contexto de inestabilidad en Valencia
Los resultados de esta auditoría al Sindic se han conocido en un momento convulso para el Gobierno de esta comunidad autónoma. Aunque Mazón dio un paso a lado en este tramo final del año, su decisión de mantener su escaño en Les Corts, muy probablemente para protegerse ante los tribunales con el aforamiento como escudo, sigue despertando polémica y provocando las críticas de los valencianos a un político que demostró una pasividad total ante una de las mayores tragedias humanas que se recuerdan en la historia reciente de España.
Además de ello, recientemente, tras la dimisión de Mazón como presidente autonómico, las negociaciones entre el PP y Vox también han despertado algunas controversias, por los puntos que han permitido que la conformación del nuevo Gobierno y la investidura de Pérez Llorca se haga efectiva.
A estos elementos se añade que, en los últimos días, Alberto Núñez Feijóo también ha levantado asperezas por hechos como haber cambiado las versiones que venía defendiendo sobre que Mazón le tuvo informado en todo momento el día de la DANA, que solo le haya trasladado a la jueza de Catarroja los mensajes que le escribió el ex presidente y no haya incluido los que escribió el gallego, además de que haya solicitado declarar por videoconferencia para evitar acudir presencialmente a Valencia el 9 de enero.