Se avecinan nubarrones para el Gobierno de coalición. El Ejecutivo tiene intención de aprobar a principios de febrero la reforma laboral pactada con sindicatos y patronal, pero los números no dan. El PSOE está intensificando los contactos con el resto de grupos parlamentarios, aunque estos afean que no se están produciendo negociaciones. Las conversaciones se limitan a que los socialistas ponen en valor el acuerdo logrado y urgen al resto de partidos a prestar sus bancadas sin modificar ni una sola coma, tal y como solicita la CEOE. En este sentido, fuentes parlamentarias del Grupo Socialista afirman que sí se han producido reuniones con ERC con el objetivo de obtener su voto, pero los independentistas niegan dichos encuentros.

Es mentira. No nos han contactado. De hecho, no existe ningún proceso de negociación porque PSOE y Unidas Podemos no quieren”, aseguran desde Esquerra Republicana a ElPlural.com. “Nosotros queremos negociar, pero no existe ningún espacio ni contenido que se acepte hablar”, profundizan. El Grupo Republicano censura que desde que Yolanda Díaz, ministra de Trabajo, comenzara a abordar el asunto hace nueves meses, “no hemos recibido ninguna invitación” ni “hemos hablado”.

ERC: "No existe ningún proceso de negociación porque PSOE y Unidas Podemos no quieren”

La única comunicación oficial que se ha producido fue el pasado 29 de diciembre del 2021, cuando “nos informaron de que el acuerdo ya estaba hecho”. Desde entonces, no ha habido reuniones para abordar el asunto pese a que “tenemos mano tendida”. Los contactos de los socialistas con Esquerra se han limitado a “tantear el entorno”. “Confunden hablar con presionar”, zanjan.

Las mismas fuentes insisten en que “estamos en el ‘no’ porque es abiertamente insuficiente y no arregla las principales carencias que impactaron en la reforma laboral del PP”.

El PSOE se justifica

Fuentes del Grupo Socialista admiten que “no ha habido un encuentro oficial” con ERC. En su lugar, ha habido “conversaciones” entre los grupos en los pasillos del Congreso, en citas en las que se han abordado otras cuestiones… 

En este sentido, achacan la virulencia de Esquerra a su guerra con Junts en Cataluña. En otras palabras, el PSOE cree que ERC pretende marcar distancias para que el sector independentista más duro no tenga la sensación de que se tragan los sapos del Gobierno.

PSOE: “Y si tiene que caer el Real Decreto, los partidos que han votado en contra tendrán que explicárselo a sus votantes”

Asimismo, admiten que “hay muchas cosas que mejorar” en la reforma laboral, pero lo fundamental era “conseguir el equilibrio” perfecto para pactar con la CEOE y sindicatos. “Y si tiene que caer el Real Decreto, los partidos que han votado en contra tendrán que explicárselo a sus votantes”, sentencian.

El ‘no’ a Ciudadanos

Mientras Unidas Podemos, con Yolanda Díaz al frente, tienta a un bloque plurinacional enrocado en el ‘no’; los socialistas no se cierran puertas y apelan al conjunto del hemiciclo. Pese a que el Partido Popular entiende que no se derogan los pilares impuestos por Mariano Rajoy en 2012,  -el propio expresidente habla de “mínimos retoques”-, se cierra en banda. Así las cosas, las bazas con las que cuenta el Ejecutivo a día de hoy son que Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), PNV y EH Bildu recapaciten y que Ciudadanos haga las veces de bisagra.

Ciudadanos, que pretende reflotar su imagen regresando al centro del tablero [gesto aún más que tímido], se ha abierto a respaldar la reforma laboral y sopesa prestar su bancada para el ‘sí’. No obstante, impone una condición: que el Ejecutivo se comprometa a no pactar con ERC, PNV y/o EH Bildu. Así lo expuso el portavoz naranja en el Congreso, Edmundo Bal, quien ratificó la idea vertida por Inés Arrimadas: “Va a depender de si las conversaciones que el Gobierno está llevando con sus socios van a llegar a buen término o no. No queremos que empeore. Entendemos la política como una política útil para los españoles y hay que defender la reforma laboral en este sentido, a pesar de que no nos gusta”.

Preguntados por si los socialistas sucumbirían a los designios de Arrimadas, desde el partido insisten en que “se va a seguir hablando con todos porque queremos que salga con cuantos más votos mejor”.

Reunión con EH Bildu

Desde EH Bildu confirman que el pasado miércoles se produjo una reunión en el Ministerio de Trabajo. Fue un encuentro "cordial" pero en el que "no se produjeron avances". La izquierda abertzale trasladó sus propuestas para modificar la reforma laboral y, por el momento, se mantienen en el no ya que el Ejecutivo las ha descartado.

El margen para que reciba el visto bueno del hemiciclo se estrecha. A PNV, ERC, EH Bildu y el voto obvio de Vox y PP habría que sumar el de la CUP, el BNG, Junts y Foro Asturias. Todos ellos suman un total de 172 diputados, a tres de la mayoría suficiente de 175 para derogar el decreto ley en el Congreso. El Gobierno apura las negociaciones con Compromís y Más País. Ambos han lamentado que la reforma es insuficiente y tiene poderosas carencias, como la de no tocar la indemnización por despido.