El Gobierno tiene una mayoría cogida con pinzas en el Congreso para aprobar cualquier medida, tal y como ya se vio en la renovación de RTVE que por un voto no salió adelante. Ahora, con la inminente publicación del Decreto Ley para la exhumación de Franco, todas las miradas se vuelven a poner en los partidos que propiciaron la llegada de Pedro Sánchez a la Moncloa, y que ya van tomando posiciones.

La primera duda sobre su apoyo a la salida del dictador del Valle de los Caídos la ha dado precisamente un partido republicano, ERC, que ha anunciado que para su apoyo el Gobierno deberá asegurarles la anulación de las sentencias franquistas, especialmente la del expresidente de la Generalitat, Lluís Companys.

En un comunicado, la formación independentista insiste en que sus reivindicaciones sobre Memoria Histórica “van mucho más allá y pasan por la reparación a todas las víctimas del franquismo”, en España y en Cataluña, “que el Estado español nunca hasta ahora ha tenido el coraje de asumir”.

Su portavoz en el Congreso, Joan Tardà, ha dicho que es “simbólicamente importante” sacar a Franco del Valle de los Caídos, pero exige al Gobierno la “reparación de todas las víctimas del franquismo”, acusándolo de “falta de coraje”.

Además, Tardà pide que el PSOE cumpla “lo que en 2004 dijeron que harían y luego negaron”. “Mantendremos nuestra coherencia”, ha insistido.