Tomás, que era el encargado de las tiendas Milano y Forever Young, ambas propiedad de Eduardo Hinojosa, ha querido reivindicarse como "director de moda" aclarando que no es un "sastre", tal y como se le conoce en los medios de comunicación. "Nunca he dicho que sea sastre", ha afirmado, antes de indicar que su trabajo es el de "director de moda" desde que tenía 25 años, aunque ha llegado a cortar prendas "por echar una mano".

Nunca pagaron en mano
El testigo ha dicho que Álvaro Pérez "el Bigotes" le dijo en reiteradas ocasiones: "Jamás se te puede escapar que tú sabes que no pagan", en referencia a las prendas que confeccionaba para Camps y Costa, entre otros dirigentes valencianos. "Nunca me han pagado en mano ni Camps ni Costa, nunca he cobrado a nadie", ha afirmado Tomás, quien ha reconocido que la secretaria de Costa se puso en contacto con él para saldar un traje, pero que a él finalmente no le pagaron nada.

Trajes para Betoret, Pedro García, Costa, Campos...

El llamado sastre ha señalado que en 2004 empezó a confeccionar trajes también para el exjefe de Gabinete de la Conselleria de Turismo Rafael Betoret, quien se ha declarado culpable de haber recibido regalos de la trama Gürtel, y después, al ex director general de Radiotelevisión Valenciana (RTVV) Pedro García. El siguiente paso, ha dicho, fue en la primavera de 2005, cuando Pérez le pidió que se desplazara a Valencia a tomar medidas al ex secretario general del PPCV Ricardo Costa y al exvicepresidente del Consell Víctor Campos -condenado, al igual que Betoret, por el TSJCV tras firmar un escrito de conformidad-.

Relación con Camps
A preguntas de la fiscal, ha afirmado que cuando viajó por primera vez a Valencia, el expresident de la Generalitat Francisco Camps no estaba incluido en esa cuenta, aunque posteriormente sí lo estuvo, ha asegurado. "Yo tomé medidas a Camps en noviembre de 2005 por primera vez. Jamás ha consentido que nadie le hiciera nada sin estar yo presente", ha relatado Tomás, quien ha explicado que uno de los primeros encargos del expresident correspondió a tres americanas "muy marcadas" que en principio no se "atrevió" a ponerse. "Pérez (el Bigotes) y yo le convencimos de que estaban a la moda, se las entallamos y luego me llamó por teléfono para decirme que se las había puesto y que había sido un éxito", ha añadido.

Trabajo de chinos
Según la declaración de este testigo, él y su equipo tuvieron que "hilar muy fino" para atender los pedidos de Camps y Costa por sus características físicas y peticiones especiales, que en el caso del primero conllevaron incluso "un trabajo de chinos". "En el caso de Camps, igual que en el de Costa, hubo que hacer un patrón especial. Estoy seguro de que Emilio Latorre (patronista de Sastgor, empresa que confeccionaban los encargos) todavía recuerda las características de estos señores, porque hubo que hacer varias cosas, copiar la trabilla del ceñidor de Puebla (sastre de Costa) y traerla de Italia; tuvimos que hilar muy fino", ha agregado.

Acto en el Vaticano
Según su testimonio, las últimas prendas de vestir que sirvió a Camps fueron en el verano de 2008 y para Costa en primavera de 2007, y ha dicho que el expresident recibió en Valencia varias prendas de vestir enviadas por él, entre ellas un chaleco blanco para un acto en el Vaticano.

Gran afecto hacia ambos
Añadió que le "duele en el alma" lo sucedido con el expresident de la Generalitat Francisco Camps y el exsecretario general del PPCV Ricardo Costa en la conocida como "causa de los trajes" porque, según ha dicho hoy en el juicio, a ambos "los quería muchísimo".

Devolvió cuatro trajes
También ha confirmado que Camps devolvió cuatro trajes a Milano a través de él y un empleado de Forever Young, Víctor Sanfelipe, porque "no le gustaban" y había habido "problemas de fábrica". "Doy fe donde sea de que devolvió esos trajes. Avisé a Pablo Crespo para que no los pagase", ha asegurado José Tomás.

Pagaba en julio
Cuando dejó Milano en septiembre de 2006 para pasar a trabajar en Forever Young, le pidió a Crespo que saldara la deuda que tenía en la tienda salvo los "cuatro trajes" devueltos por Camps. Asimismo, ha destacado que Crespo le hacía detallar las prendas que consumía cada una de las personas asociadas a la cuenta, y solía pagar la deuda casi siempre en julio, algo que ha reconocido que le "mosqueaba mucho" porque era el mes en el que él se cogía vacaciones.

Ha señalado que aunque esa cuenta no suponía más que el 0,3 % o 0,4 % del volumen total de facturación de la tienda, y representaba un gran trabajo, por los desplazamientos que tenía que realizar para tomar medidas a estas personas, para él era "un orgullo" servirles.

Comida con Correa
Preguntado sobre si conocía a Francisco Correa, Tomás ha dicho haberlo visto dos veces, una cuando se lo presentaron en la calle y otra cuando el propietario de Forever Young, Eduardo Hinojosa, le pidió que organizara con él una comida para proponerle un negocio. Asimismo, ha asegurado que fuera de la tienda no ha tenido "trato con ninguno" de los supuestos cabecillas de la trama corrupta ni con los implicados en el caso Gürtel.